Los ultras dejan el Bernabéu
El grupo fanático de seguidores blancos, Ultras Sur, decidió no ocupar su guarida en el Bernabéu, su fondo, en protesta por las detenciones de algunos de sus miembros a causa de los incidentes del pasado martes. La calma de un montón de asientos vacíos sustituyó a los berridos, escupitajos e insultos habituales. Algunos ultras que asistieron al choque abandonaron sus localidades en el minuto 30 de la primera mitad. Dos jóvenes se ocuparon de dirigir la operación de desalojo. El público de Chamartín aplaudió la decisión de los fanáticos de marcharse.
'O respetan las normas o no vuelven al campo', advirtió el pasado miércoles al grupo radical el presidente del club blanco, Florentino Pérez. Los ultras ocupaban el fondo sur desde octubre del año pasado tras haber sido desterrados al último anfiteatro en la última etapa de Lorenzo Sanz.
Los fotógrafos, principal diana de las agresiones de los radicales, se reunieron ayer con el delegado del Gobierno, Francisco Javier Ansuátegui, para buscar soluciones al acoso que sufren en el Bernabéu.
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