La UEFA amenaza al Barcelona con el cierre del Camp Nou

La UEFA ha amenazado al Barcelona con la clausura del Camp Nou o con obligarle a jugar un partido a puerta cerrada si se repitieran en su semifinal de la Liga de Campeones ante el Madrid incidentes como los registrados frente al Panathinaikos. En el encuentro contra el equipo griego se encendieron varias bengalas -la carcasa de una alcanzó al portero Nikopolidis-, se lanzaron otros objetos y un faisán llegó a corretear durante tres minutos por el césped. El Comité de Disciplina del organismo europeo ya multó al club con 136.442 euros (22,7 millones de pesetas) y le advirtió de que la próxima vez será más severo. 'De momento, es sólo un aviso', dijeron fuentes del mismo.

El Barça ha decidido que para el encuentro con el Madrid se instalen unas redes gigantes de protección tras las porterías. 'No será la primera vez. Lo hemos hecho en momentos puntuales. Tenemos que tomar precauciones ante el riesgo del cierre', admitió ayer Joan Gaspart. Pero el presidente azulgrana expresó su confianza en que impere la actitud de la gran mayoría de los aficionados, que, dijo, 'es modélica al 99,99%. Aunque entre 100.000, siempre puede haber una o dos personas que cometan acciones incorrectas'.

La directiva es consciente de que esa medida es impopular, pero se ha visto forzada a tomarla por los numerosos altercados ocurridos esta temporada en el Camp Nou, especialmente en el partido con el Panathinaikos. 'Fue un número espantoso', dijo una fuente policial al recordar la turbia atmósfera que se creó en el estadio. Los boixos encendieron varias bengalas, hubo un pequeño foco de fuego, se arrojaron objetos contra los masajistas griegos cuando regresaron al banquillo después de atender a un jugador lesionado y hubo un intento final de invadir el campo. La perla fue el faisán, introducido por un socio en una mochila y que salió de la tribuna, la zona más acomodada.

El sistema de seguridad del Camp Nou ya quedó en evidencia en el último Barça-Madrid. Dos activistas del movimiento antiglobalización se esposaron en una portería y dos independentistas vascos saltaron al rectángulo exhibiendo ikurriñas.