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Los vecinos tachan el proceso de 'extorsión'

Los afectados contrarios a la ZAL creen que todo el proyecto es una burbuja especulativa para arrebatarles sus propiedades y construir luego viviendas, próximas a la Ciudad de las Artes y de las Ciencias, para las clases pudientes. Cuestionan la necesidad del proyecto, ahora que se diseña una ZAL en el puerto de Sagunto. Y plantean varias preguntas: ¿por qué no se han construido ya las casas para los realojos en la unidad de ejecución 1?; ¿si sólo hay unos pocos afectados, para quién van a ser las 180 viviendas diseñadas sólo en esa zona?; ¿y por qué dicen que los proyectos urbanísticos de Pinedo también son para realojar a los afectados de La Punta? Por último denuncian los usos previstos en la unidad de ejecución 2 de la ZAL, la única que ha salido a exposición pública, y que prevé, desde supermercados, restaurantes, concesionarios de coches y peluquerías, hasta viviendas unifamiliares, salas de fiestas y hoteles. 'Eso no es un polígono industrial', se quejan.

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Tampoco les gusta el método de los promotores para hacerse con sus tierras. 'Recibes una carta en la que te dicen que acudas a las actas previas el día tal y que tu terreno, a 1,20 euros (200 pesetas) el metro cuadrado, vale tanto'. Según los propietarios críticos con la ZAL ésa es la primera información oficial que tuvieron del proyecto. 'La siguiente notificación es cuando te dicen que tienes dos meses para irte de tu casa', afirma uno de los afectados, que asegura que no acudió a la primera reunión pero su abogado mandó un escrito oponiéndose al proyecto y solicitando el realojo en caso de que la expropiación se llevara a cabo. Escrito al que, asegura, nunca le han respondido.

Reconocen que los precios que se han pagado a conocidos de La Punta que sí han vendido son mayores pero tachan el proceso de 'extorsión'. A su juicio, si hay expropiación por un interés público se expropia a todos pero no se puede convocar a los afectados, en su mayoría ancianos y con niveles culturales bajos, y decirles: 'Sus tierras están tasadas en tanto, pero si firman les vamos a dar más; o se la compro a 5.000 [pesetas (30 euros)] o se la expropio a 200 [pesetas (1,20 euros)]'. Una estrategia que a su juicio tiene un fundamento: 'Los que han vendido pierden todos los derechos si al final no se construyera la ZAL, con lo que los promotores se evitan problemas futuros'. A ellos les queda el consuelo de que la expropiación les deja vía libre para reclamar.

En cuanto a los realojos temporales y el futuro retorno a La Punta, los afectados afirman que si tienen casi todo el suelo de la zona prevista para las viviendas por qué no han lanzado el proyecto ya y han empezado las obras. 'Antes de desahuciarte tendrían que tener las casas acabadas', critica. Y creen tener otra respuesta. 'En dos o tres años, si es que al final se construyen, muchos de los afectados, en su mayoría ancianos, se habrán buscado otro lugar o, lo que es peor, se habrán muerto'. Es más, critican que el precio que les pagan por sus casas, la mayoría de alrededor de 300 metros cuadrados, apenas les llega para comprar el adosado que les ofrecen a un precio tres veces mayor. Y, total, para acabar viviendo en menos de 100 metros. 'Y si tienes tierras en otro sitio, dónde metes el tractor, o los aperos de labranza, o los animales...'

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