Vallejo también empató con Anand

La situación de Francisco Vallejo en Linares recuerda a un alpinista que afronta todos los ochomiles consecutivamente. Tras salir indemne el sábado del Everest (Gari Kaspárov), el español también sobrevivió al K2 del torneo (Viswanathan Anand). Hoy se enfrenta al ucranio Vasili Ivanchuk, quien ayer firmó un empate sin lucha con el español Alexéi Shírov. El ucranio Ruslan Ponomáriov sufrió su primera derrota como campeón del mundo, ante el británico Michael Adams.

Vallejo, 60º del mundo antes de este torneo, ha logrado dos empates que harían volar en la gloria a cualquier jugador de su nivel. Pero él mantiene los pies pegados al suelo: "El torneo es ahora para mí dos partidas menos difícil que el viernes", dijo tras analizar brevemente con Anand, mientras comía unas pasas.

Animado por el éxito de la víspera, el menorquín repitió estrategia, esta vez con las piezas negras: cerrojo total, en porfía de que su rival se debilitase al atacar. Para ello, optó por la famosa defensa berlinesa, que Krámnik puso de moda en octubre de 2000, cuando destronó a Gari Kaspárov. Le inspiró el bosnio Iván Sokólov, con quien empató hace dos meses un duelo en Mondariz (Pontevedra): "Cuando Sokólov me jugó esa variante me di cuenta de que es realmente durísima, de modo que la incorporé a mi repertorio", explicó.

Anand reconoció que no había logrado una ventaja sustancial en toda la partida: "Vallejo ha salido de la apertura sin problemas, y luego ha jugado muy bien. Desgraciadamente, no puedo decir lo mismo de mí. Es una de las peores partidas que recuerdo. En la posición final, ofrezco tablas porque estoy algo peor, aunque creo que tengo recursos suficientes".

Mate al campeón

Es raro que un campeón del mundo pierda por jaque mate, como le ocurrió ayer a Ponomáriov ante Adams, tras una larguísima agonía de 81 movimientos en seis horas y media. El ucranio no aclaró si permitió ese desenlace por elegancia, como un reconocimiento a la excelente labor técnica del británico, o simplemente por omisión, porque estaba tan concentrado en provocar tablas por rey ahogado -su única posibilidad en esa posición- que no vio lo que le iba a pasar.

En todo caso, la partida refleja que la imagen gris de Adams es injusta: se habla muy poco de él, pero ocupa el 4º puesto de la lista mundial con todo merecimiento. De joven, Micky era un jugador agresivo, como casi todos los ajedrecistas británicos de su generación. Ahora, a los 30 años, Adams es un virtuoso del juego posicional: cuando logra una ventaja posicional, juega con la precisión de una computadora y rara vez se equivoca al transformar esa ventaja en victoria, por muy largo y difícil que sea el proceso.

Kaspárov, que mantiene una relación muy cordial con Adams, no ocultó su alegría por la derrota del joven ucranio, cuyo título mundial menosprecia. "Ponomáriov es como [el estadounidense, ahora retirado] Gata Kamski, siempre juega hasta el último recurso y no se rinde aunque esté completamente perdido", dijo mientras cenaba con su analista, Yuri Dojoián, tras un apacible día de descanso. Sin embargo, el ruso tuvo un detalle con el campeón de la Federación Internacional (FIDE): "Para ser justo debo añadir que Ponomáriov pierde muchas menos partidas que Kamski".

Resultados (2ª ronda): Anand - Vallejo, tablas; Adams - Ponomáriov, 1-0; Ivanchuk - Shírov, tablas; descansó Kaspárov.

Clasificación: 1º. Adams, 1 punto en una partida. 2º-5º. Vallejo, Ponomáriov, Anand y Shírov, 1 en dos. 6º. Kaspárov, 0,5 en una. 7º. Ivanchuk, 0,5 en dos.

Tercera ronda (hoy): Shírov - Adams; Vallejo - Ivanchuk; Kaspárov - Anand; descansa Ponomáriov.