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Alicante exhibe la 'vigencia' de la obra de Gerardo Rueda

Eduardo Capa reúne 60 piezas del escultor

La obra de un pintor que se convirtió a la escultura llega a Alicante. Gerardo Rueda (Madrid 1926-1996) expone 60 esculturas en el Castillo de Santa Bárbara, en el marco de la Fundación Capa en una muestra retrospectiva que refleja la 'vigencia' de las distintas etapas de este artista que utiliza la madera, el hierro y cualquier desecho o materiales inservibles para convertirlos en arte. La exposición permanecerá abierta hasta 19 de mayo.

La obra de Gerardo Rueda es 'una plástica que goza de vigencia y de actualidad', comentó el escultor Eduardo Capa durante la presentación de la exposición, ya que está considerado como uno de los artistas más importantes de la segunda mitad del siglo XX. 'Utiliza elementos sencillos y rigurosos', agregó Capa, quien resaltó los elementos geométricos de su obra.

Gerardo Rueda pertenece a la generación de Torner, Zóbel y Mompó, un grupo de artistas que impulsaron el Museo de Arte Abstracto de Cuenca, y que constituyen, para algunos críticos como Alfonso de la Torre, la generación del silencio.

Rueda se inició, primero, en la pintura y luego llegó a la escultura, 'siguiendo el proceso natural de cualquier artista', explicó José Guirao, comisario de exposición. La obra expuesta en Alicante muestra un 'peculiar tratamiento del espacio, de la madera y del color', según explicó José Guirao.

La influencia cubista, constructivista y del Renacimiento están presentes en sus primeras esculturas. En la época de mayor madurez, desde los años ochenta hasta su muerte, adquiere un protagonismo especial la 'redención de los materiales', dijo el comisario de la exposición.

'Aquí radica la particularidad de su obra, en coger material de desecho, botes, latas y maderas y transformarlas en arte', explicó Paloma Esteban, que también ha colaborado en la exposición. El hijo del artista, José Luis Rueda, destacó que la muestra 'tiene un valor especial, ya que se proyectó cuando mi padre vivía, y fue en el IVAM de Valencia el último lugar donde expuso en vida'.

La exposición reúne un conjunto de obra de madurez formado por piezas escultóricas, que Rueda realizó entre 1970 y 1996, que se completa con un número reducido de de dibujos y collages representantivos de sus inicios en 1949. La muestra coincide en el tiempo con la que se abrió esta semana en el recién inaugurado Museo Kampa de Praga, que ha escogido la obra de Rueda para abrir sus puertas.

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