Asociaciones de yoqueis, grupos políticos e intelectuales redactan un manifiesto para 'recuperar' el hipódromo

Un grupo de asociaciones relacionadas con el mundo de la hípica, así como relevantes personalidades de la vida intelectual y política de Madrid, van a proponer la firma de un manifiesto para reivindicar la 'recuperación' y reapertura en 2002 del hipódromo de la Zarzuela, abandonado desde hace más de seis años y cuya nueva gestión está pendiente aún de un concurso que debe convocar Patrimonio Nacional. El manifiesto se dará a conocer hoy e intenta atraer la atención de los aficionados y de los miles de trabajadores de empleos indirectos que cayeron con el cierre del centro hípico, según IU-Madrid; está firmado por las principales asociaciones de yoqueis, preparadores de caballos, criadores, jinetes aficionados y veterinarios especialistas en equinos, además del comité de empresa del hipódromo.

Figuran, igualmente, los nombres de afamados aficionados a la hípica, como el filósofo Fernando Savater, el chef Abraham García, propietario del restaurante Viridiana, y el decano de la Facultad de Veterinaria de Madrid, Manuel Rodríguez, así como de responsables políticos que han impulsado esta idea, entre ellos Inés Sabanés, portavoz de IU en el Ayuntamiento.

El texto del manifiesto hace hincapié en el terrible deterioro que han sufrido las instalaciones del hipódromo madrileño desde su última carrera, el 17 de diciembre de 1996, y cómo a partir de ese momento la caída en picado de la actividad ocasionó no sólo la pérdida de miles de puestos de trabajo, sino del prestigio de uno de los mejores centros de equitación de Europa.

El hipódromo de la Zarzuela era 'la más internacional de las obras arquitectónicas realizadas en nuestro país antes de la guerra civil, y está enclavado en una finca que se extiende a lo largo de un millón de metros cuadrados cuyo valor ecológico es excepcional', recuerda el manifiesto.

Actualmente, la cabaña equina ha pasado de 1.200 a 150 ejemplares; sus instalaciones, protegidas por la ley por su alto valor ecológico, paisajístico e histórico-artístico se han deteriorado por el abandono y por la falta de mantenimiento; más de 700 cuadras amenazan ruina y la muy castigada pista de hierba necesitaría al menos seis meses de obra para que los caballos volvieran a galopar en ella, destaca la nota.

Por todo ello, los firmantes del manifiesto por la reapertura del hipódromo piden a Patrimonio Nacional que 'establezca un plan de protección ambiental y de mantenimiento del conjunto histórico y las instalaciones' y que habilite una comisión con el Ayuntamiento de la capital y la Comunidad de Madrid para evaluar su gestión futura y acelerar su reapertura.