El Gobierno canario considera una 'provocación' la liberación de ocho inmigrantes

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía que custodian a los 350 inmigrantes irregulares que se hacinan en la antigua terminal del aeropuerto de Fuerteventura han liberado a ocho de ellos en la misma isla, lo que supone un punto de inflexión en la tendencia de enviarlos a otras islas o ciudades de la Península. El hecho ha sido denunciado por el consejero canario de Asuntos Sociales, Marcial Morales, que lo calificó como 'una provocación más o una gran torpeza' del delegado del Gobierno para la Inmigración, Enrique Fernández Miranda.

'Nuestra capacidad de asombro se supera una vez más con estos nuevos despropósitos', dijo Morales, quien alertó de la 'gravísima repercusión' que tendría la liberación masiva de inmigrantes en una población como Puerto de Rosario, con apenas 19.300 habitantes, lo que 'raya el disparate'.

Marcial Morales insistió en destacar la 'incompetencia' de Fernández Miranda, de quien dijo que en dos años 'no ha creado en las islas ningún centro de acogida de inmigrantes', mientras el Gobierno de Canarias 'adquiere patrulleras y los ayuntamientos costean el combustible y fax de la Guardia Civil'.

El presidente Cruz Roja en Fuerteventura, Gerardo Mesa, confirmó que dos subsaharianos fueron liberados el domingo pasado y otros seis el lunes. En el Centro de Baja Incidencia recibieron ducha, ropa limpia de segunda mano, cenaron, durmieron y, tras desayunar, se dedicaban a deambular por las calles de Puerto del Rosario 'como harían en el parque de Santa Catalina, si hubieran sido trasladados a Las Palmas'.

En la antigua terminal del aeropuerto de Fuerteventura permanecen unos 350 inmigrantes, que viven 'como sardinas en lata', según los voluntarios que los atienden, a la espera de ser trasladados a otras ciudades o repatriados.