Pintor de caballería y mucho más

Se le conoce como 'pintor de caballos' por la maestría con la que retrató estos animales tanto en las escenas castrenses como civiles. Pero la trayectoria de Josep Cusachs i Cusachs (Montpellier, 1851-Barcelona, 1908) es más amplia en registros pictóricos y esta diversidad es la que precisamente quiere mostrar la exposición retrospectiva que puede visitarse en el Museo Militar de Montjuïc. Organizada con motivo del 150º aniversario del nacimiento del pintor, la exhibición reúne unos 40 óleos y 32 dibujos, acuarelas y carteles. Se completa, además, con documentación sobre el artista y una selección de uniformes militares y vestidos femeninos de la época.

El historiador Pedro Mora, comisario de la exposición -que hoy pronunciará una conferencia sobre la obra del artista en el castillo de Montjuïc-, sitúa a Cusachs dentro de la corriente del 'naturalismo anecdótico', si bien hacia finales de su vida y en determinados temas se aprecia cierta infuencia del impresionismo francés, que había conocido en sus visitas a París, donde estudió con Eduardo Detaille, especialista en pintura militar.

Josep Cusachs fue en su juventud militar de artillería y participó en diversas campañas militares. La convulsa política de la época y el descontento influyeron en su decisión de dejar el Ejército, con el rango de comandante, en 1882, para dedicarse únicamente a la pintura. Tenía 31 años y ya había expuesto sus obras en la Sala Parés, galería en la que siguió exhibiéndolas de forma regular. La exposición, tras un prólogo en el que se alude de forma escenográfica al taller del artista, comienza con sus obras más conocidas, la pintura de temática militar. Contra lo que pudiera pensarse, no es una pintura épica. Cusachs se centra sobre todo en la vida castrense cotidiana. Además de su conocimiento del tema, destaca la presencia casi omnipresente del caballo, que es el gran protagonista de su pintura también en las escenas civiles.