Cuatro muertos en un choque frontal entre dos turismos en la M-405

Un choque fronto-lateral entre un Opel Calibra y un Renault 21 en la carretera M-405 (Fuenlabrada-Griñón) se saldó ayer con cuatro fallecidos, todos muertos en el acto. El choque se produjo cuando un Citroën Xsara inició un adelantamiento prohibido. El vehículo que circulaba por el otro sentido, un Opel Calibra, intentó esquivarlo e invadió el carril contrario. Un Renault 21 no pudo frenar y arrolló al Opel, según explicó José Martín, el conductor de un vehículo también implicado en el choque.

El accidente ocurrió sobre las dos de la tarde en el kilómetro 5,500 de la M-405, en el término municipal de Griñón. Según explicó José Martín, el conductor del Citroën Xsara ya había hecho 'una pirula' nada más salir de Humanes: intentó adelantar a un par de vehículos cuando otro venía de frente. En esa ocasión, el conductor que venía de frente pudo frenar a tiempo y esquivar al Xsara tras detenerse en la cuneta.

El conductor del Xsara, con matrícula moderna de cuatro números y tres letras, intentó adelantar de nuevo durante todo el trayecto, según el testigo. Cuando llegó al kilómetro 5,500, entró en el carril contrario y provocó el accidente. El conductor del Opel Calibra de color rojo y matrícula M-3376-LU, vecino de Fuenlabrada, intentó evitar el choque con el turismo. Su reacción fue pegar un volantazo al lado izquierdo, lo que le llevó a invadir el carril contrario. Al principio de una fila de coches que circulaba por ese carril iba un Renault 21 de color gris y con matrícula M-7998-OP, que no pudo frenar a tiempo y arrolló al Opel. La fuerza del impacto hizo que este último se saliera de la carretera y quedara convertido en un amasijo de hierros. Su conductor, J. B. R., de 29 años, falleció en el acto.

'Aún movía la cabeza'

El Renault 21 quedó vuelto en sentido contrario al que circulaba. En él viajaban F. B. J., de 58 años; su esposa, C. G. D., de 57, y otra mujer, T. R. B, de 71. Todos murieron. 'Cuando me he bajado, la mujer que iba delante aún movía un poco la cabeza, como con señal de dolor. Las emergencias han tardado unos minutos en llegar, y ella ha muerto', señaló Martín. 'La pena es que el conductor del Xsara no se haya estampado un kilómetro después contra una pared y se haya matado también él. No ha tenido ni la poca vergüenza de parar, después de la que ha provocado', dijo el testigo. Éste sólo pudo precisar que el turismo que se fugó iba conducido por un joven. Los bomberos de la Comunidad acudieron para sacar a las víctimas de los coches.

La Guardia Civil de Tráfico investigaba ayer el paradero del conductor del Xsara.

Por otra parte, G. G. J., de 27 años, el conductor del vehículo que atropelló el sábado a un mendigo en la calle de la Princesa, se entregó esa misma tarde a la policía tras llamar al 092, según informó un portavoz de la Policía Municipal.