El paro en Francia aumenta por tercer mes consecutivo
Las cifras del paro en Francia, que se han orientado a la baja de manera casi continua desde hace cuatro años, aumentaron el pasado mes de agosto por tercer mes consecutivo. El número de parados creció un 1,9%, es decir, que 39.600 personas se incorporaron a las listas de demandantes de empleo ese mes, según los datos de la Agencia Nacional para el Empleo. Con este incremento, el número total de desempleados supera los 2,1 millones.
'Estas cifras no son buenas, no hay que andarse con rodeos', admitió Elisabeth Guigou, ministra socialista de Empleo y Solidaridad, 'pero sólo corresponden a un rellano turbulento. El objetivo de un 8,5% de parados para finales del 2001 sigue figurando entre los del Gobierno', señaló la ministra. Los últimos datos han elevado la tasa desde el 8,8% de junio al 8,9%.
Aunque las cifras no son positivas, el aumento de julio tampoco supone una sorpresa, ya que frecuentemente en los meses de verano se registran aumentos coyunturales del desempleo. La llegada al mercado de trabajo de los estudiantes que demandan un primer empleo engrosa la lista. No obstante, es el fuerte incremento registrado lo que preocupa. En los dos meses anteriores, el aumento del paro fue mucho más moderado: un 0,3% en mayo y un 0,4% en junio.
Tendencia positiva
La ministra de Empleo se mostró confiada en remontar pronto esos datos al asegurar que 'la tendencia está bien orientada y que las perspectivas no son negativas'. El número de desempleados inscritos desde hace más de un año continúa invariable, pero quienes llevan en el paro más de tres años van disminuyendo (un 1,6%, según los últimos datos).
La reducción del paro ha sido una de las principales bazas del Gobierno socialista de Lionel Jospin. Entre junio de 1997 y junio del 2001, el Ejecutivo presidido por el socialista Lionel Jospin ha logrado rebajarlo de un 12,6% al actual 8,9%, es decir, que en vez de tres millones y medio de personas sin trabajo hoy sean dos millones las que se encuentran en esa situación. Distinto es si no se incluyen las personas con trabajo ocasional (menos de 78 horas al mes), pues en ese caso en julio se ha producido una reducción del 0,5%.
Si durante el año 2000 la economía francesa creció a un ritmo del 3,4% del producto interior bruto (PIB), este crecimiento se situará entre el 2,3% y el 2,5% en 2001, una cifra que debiera servir para seguir creando empleo.
La mayoría de analistas coincide en señalar que el aumento del paro será temporal y se verá reabsorbido el próximo otoño, cuando 'mejore el clima internacional' gracias a que los precios se mantienen estables y el consumo interior progresa ligeramente. Otras opiniones señalan el peligro de que 'la crisis de confianza' pueda determinar que las familias 'prefieran ahorrar en vez de consumir', lo que detendría la creación de empleo.
