La Costa Azul y Londres se perfilan como sedes del Mundial

El S.O.S. lanzado por la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) ha tenido efecto rápidamente: Cannes (Francia), Montecarlo (Mónaco) y Londres son las tres ciudades mejor situadas para organizar el Campeonato del Mundo, a partir del 25 de noviembre. Las negociaciones se intentan mantener en secreto, y hay serias discrepancias para repartir las eliminatorias y la final.

Tres fuentes de distinta procedencia confirmaron a este diario que los rusos Kirsán Iliumyínov y Artiom Tarásov, presidentes de la FIDE y FIDE Comercio, respectivamente, dirigen personalmente las negociaciones con organizadores de esas tres ciudades y tienen la intención de alcanzar un acuerdo este fin de semana.

Iliumyínov, que aportará algo más de tres millones de dólares (unos 600 millones de pesetas) en premios para los torneos masculino y femenino, va a entrevistarse con un miembro de la familia real monegasca para que Montecarlo sea la sede de todas las eliminatorias hasta las semifinales, del 25 de noviembre al 12 de diciembre, cuyos ganadores se enfrentarían en Londres del 2 al 12 de enero. Cannes se mantiene por ahora en un segundo plano, para el caso de que no se llegue a un acuerdo en Montecarlo.

Pero hay un problema importante. Una persona cercana a las negociaciones en la Costa Azul lo explicó así: “La FIDE quiere que la final se dispute en Londres para satisfacer los deseos de Octagon”, la multinacional dedicada al deporte profesional que tiene un contrato firmado con FIDE Comercio, “pero los franceses y monegascos se niegan a organizar todas las eliminatorias para que Londres se lleve después el plato fuerte”. Sin embargo, la capacidad de presión de los interlocutores de Iliumyínov es más bien poca, dado que sólo aportan 400.000 dólares (76 millones de pesetas) en concepto de gastos de organización.

Dos datos adicionales incitan a pensar que la FIDE tiene bien encarrilada la situación. Por un lado, sus directivos han aconsejado a los promotores de otras candidaturas que paralicen sus gestiones, dado que tienen escasas posibilidades de éxito. Por otro, el nigeriano Emmanuel Omuku, director ejecutivo de la FIDE, firmó ayer un comunicado categórico: “Aprovecho la oportunidad para recordar a los escépticos sobre la capacidad de la FIDE que hemos cumplido nuestros compromisos desde 1997 hasta ahora, a pesar de todos los obstáculos. El Campeonato del mundo se disputará desde el 25 de noviembre en una sede, cuyo nombre será anunciado por el presidente tras la culminación de las negociaciones, que responderá a los intereses del ajedrez y de la FIDE”.