Federer corta la lista de récords de Sampras
La leyenda de Pete Sampras en Wimbledon no se extenderá más. Al menos, hasta el próximo año. El suizo Roger Federer, un tenista de 19 años que no había ganado ni un partido en la catedral en sus dos participaciones anteriores, causó ayer la sorpresa de la jornada al eliminar al campeón de los últimos cuatro años por 7-6 (9-7), 5-7, 6-4, 6-7 (2-7), 7-5 tras 3.41 horas. 'Le doy todo el crédito', comentó Sampras, aludiendo a su verdugo; 'es un gran jugador y tiene un buen futuro por delante', dijo.
Sampras entró en la leyenda el año pasado en Wimbledon cuando consiguió ganar su 13º torneo de Grand Slam y se convirtió en el jugador con más títulos grandes, dejando atrás incluso a Roy Emerson. Cuando llegó hace poco más de una semana vislumbraba la posibilidad de alcanzar otros récords. Sin embargo, el aplomo y el descaro de Federer le sorprendió. Sólo pudo igualar las 31 victorias consecutivas de Rod Laver en Wimbledon (Borg encadenó 41), pero no logro deshacer el empate a siete títulos que mantiene con Williams Renshaw, ni situarse a la altura de Borg, que conquistó cinco veces consecutivas el título. 'Volveré el próximo año, porque pienso que puedo volver a ganar', sentenció.
Sin embargo, en la pista que le había encumbrado, Sampras no fue el mismo de siempre. Realizó 25 aces, igual que Federer, pero en los momentos decisivos no encontró la cadencia de saques, restos y voleas que acudían en su auxilio para salvarle de situaciones aparentemente irresolubles. Federer, en cambio, mantuvo la calma, fue paciente y buscó con insistencia el break que debía darle la victoria. Al final lo consiguió. En su primera bola de partido, Federer conectó un drive paralelo de resto que dejó a Sampras sin recursos. 'El primer impacto que recuerdo de Sampras', explicó Federer, un rebelde que ha logrado domar su carácter, 'fue cuando vomitando acabó ganando a Corretja en cuartos de final del Open de EEUU 96'.
En realidad, Sampras había dado ya signos de flaqueza en Roland Garros, cuando perdió ante el español Galo Blanco en la segunda ronda. Se le vió lento de reflejos y en los desplazamientos. Y no pareció en condiciones de defender el título en el torneo básico de su temporada. Sampras no perdía en Wimbledon desde los cuartos de final de 1996 cuando cayó ante Richard Krajicek. Su derrota de ayer vino acompañada por la sorprendente eliminación del australiano Lleyton Hewitt -llevaba 15 victorias consecutivas en hierba-, ante el francés Nicolás Escudé en cinco mangas. Y también de una nueva muestra de la ilusión que invade al croata Goran Ivanisevic cada vez que logra un nuevo triunfo: ayer eliminó a Greg Rusdeski conectando 22 aces (lleva 120 en total).
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