Los tópicos de una leyenda negra
'Sigue habiendo una leyenda negra llena de falsedades y tópicos alrededor de la crueldad extrema de los tribunales inquisitoriales españoles; teniendo en cuenta que aquella época era extremadamente cruel en toda Europa, lo real es que tribunales inquisitoriales como el del Reino de Granada eran infinitamente menos severos que otros civiles en España o inquisitoriales en el resto de Europa, sobre todo en lo que respecta a la persecución de delitos contra la hechicería y la superstición', aclara el historiador Martín Soto, que recuerda que la Leyenda Negra ha sido 'un arma política de primer orden de otros países contra España'.
Lo cierto es que Granada fue un centro relacionado con la magia. Las hechiceras más famosas de la época fueron dos hermanas cordobesas conocidas como las Camachas, que aparecen incluso mitificadas en varias obras de Cervantes. La mayor de ellas fue a Granada a estudiar hechicería de una mora que, decían, era capaz de provocar tormentas y convocar demonios. Famoso fue también Pedro Sánchez Bravo, El Peorro, al que se le atribuían los poderes de transformarse o transformar a alguien en animal con sólo soplar humo de tabaco.
Pero al margen de la literatura, el morbo y la fantasía, Martín Soto puede hacer un perfil de la hechicera granadina: 'tendría entre los 40 y 50 años y habría sido antes cliente de la cristiandad; salvo en casos excepcionales, como sucedió en el convento Santa Clara de la Paz de Antequera a principios del XVI, no suele practicar aquelarres'. Recuerda el historiador que los aquelarres eran prácticas 'más propias de países del norte; aquí las brujas fabricaban ungüentos y tenían buenos conocimientos empíricos de las propiedades de las plantas y qué estados lograr con ellas'.
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