Monteseirín: 'Sevilla ha recuperado su Madrugá'

El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), disfruta estos días de la satisfacción que deja el trabajo bien hecho. Después de los incidentes vividos en la Madrugá de la Semana Santa de 2000, Monteseirín se puso a la cabeza de un sofisticado dispositivo de seguridad que ha velado por que este año no hubiera sorpresas.

Con esa batalla ganada, el alcalde deberá afrontar ahora otras tareas pendientes y ya piensa en aplicar esos mismos métodos a la vida diaria del Ayuntamiento que dirige. La primera, rehacer las relaciones con los andalucistas, sus socios en el gobierno municipal. En una entrevista, Sánchez Monteseirín considera necesario superar diferencias entre PSOE y PA, partido este último al que atribuye la 'llave' de la gobernabilidad. El alcalde asegura que los problemas internos del grupo municipal socialista están zanjados.

'Sevilla necesita que se aúnen esfuerzos, no puede desperdiciar energías en cuitas internas'

Pregunta. ¿Qué balance hace de la Semana Santa?

Respuesta. Ha sido una Semana Santa extraordinaria y la Madrugá más tranquila que se recuerda en muchos años. Sevilla ha recuperado su Madrugá para siempre, y eso es fruto del trabajo de mucha gente. 50 personas en el Centro de Coordinación Operativa (Cecop), y otras 2.500 trabajando en la calle durante toda la semana y especialmente en la Madrugá.

P. ¿Los sucesos del año pasado evidenciaron la necesidad de actualizar la seguridad?

R. Esa fue mi apuesta y mi decisión. Sevilla se jugaba muchísimo este año. Y yo me la quise jugar con Sevilla. Puse en marcha unos mecanismos de coordinación inéditos y opté por tomar las riendas de la cuestión. Soy el máximo responsable de acuerdo con la ley y quiero serlo, además, de cara a la ciudad. Me decían que como salieran mal las cosas me iba a caer con todo el equipo, pero yo no soy persona de esconderme.

P. ¿Se va a repetir el plan para la Feria de Abril?

R. En Feria y el resto del año. El Cecop funcionará para cualquier acontecimiento que lo requiera. En Feria tendremos una oficina cerca del recinto, en el parque de los principes probablemente.

P. Ahora deberá aplicar esa política de coordinación dentro del gobierno y de su grupo.

R. Una ciudad como ésta necesita que se aúnen esfuerzos. Sevilla no puede permitirse desperdiciar energías en cuitas internas. Cada cual debe trabajar en lo suyo, pero pensando que lo suyo será más posible si sacamos adelante lo de todos. Es una forma de entender la política que levanta recelos al principio pero que enseguida encuentra apoyos porque se ven los resultados.

P. ¿Ha convencido ya a su grupo para que trabaje como equipo?

R. Eso está solventado desde antes de la Semana Santa. Lo que hay que resolver ahora, inmediatamente, es la relación con el socio de gobierno, que sigue pendiente porque no he tenido tiempo ni mente para otra cosa más que para la Semana Santa.

P. ¿Qué medidas va a adoptar para rehacer esas relaciones?

R. Vamos a hablar las cosas, pero entre nosotros. Transparencia absoluta en la gestión, para que haya control democrático y permanente de las cosas que hacemos. Pero, ¿qué necesidad hay de resolver en la plaza pública lo que se puede resolver discretamente en casa?

P. ¿No han sido demasiados roces en estos dos años de mandato?

R. Esto último ha sido un incidente que se salió de lo habitual, pero no es el primero. Y no lo es porque no estamos resignados a esa división en compartimentos estancos de las tareas municipales. Hay una costumbre de ocho años de una manera de funcionar el Ayuntamiento absolutamente deslabazada. Cuando ahora uno intenta entrelazar todas estas cosas, puede haber roces.

P. ¿Hace falta un Cecop en el gobierno municipal?

R. La filosofía de un centro de coordinación operativa nos sería muy útil, desde luego. Ese trabajo de integración de los esfuerzos, de superar esa frontera rígida entre las distintas instituciones y servicios es una dinámica magnífica para gobernar.

P. ¿Cree que la crisis con los socios de gobierno debe resolverse institucionalmente o deben intervenir los partidos?

R. Las dos cosas. Desde lo institucional se ve todo desde una perspectiva y desde los partidos desde otra, y ambas son útiles y necesarias para resolver estas cuestiones que, no obstante, son menores de lo que aparentan, porque garantizo que en ningún momento estos problemas han afectado a la gobernabilidad.

P. El PA sí que les ha dado bastante trascendencia.

R. Es lógico. El PA se ha sentido molesto por una cuestión, votar con el PP en un pleno, pero eso no es una estrategia del PSOE. Es un hecho aislado que tiene que ver más con la competencia de dos delegados.

P. Pero algunos miembros de su partido sí lo han visto como un punto de inflexión en la estrategia hacia el socio de gobierno.

R. Los distintos delegados, en su afán por ejercer sus competencias, terminan teniendo sus diferencias. Pero son roces, no estrategias políticas. Es una barbaridad pensar que un roce cotidiano va a terminar con una estrategia política como es el pacto de gobierno entre el PSOE y el PA.

P. La aclaración de esas diferencias de criterio debe haber sido parte de su labor para apaciguar las aguas dentro de su grupo.

R. Hay un documento elaborado entre todos: el grupo socialista, la ejecutiva del partido y yo mismo. Es público y es la voz de todos. Ahí se recoge la estrategia y la posición común.

P. ¿Qué le parece que Luis Navarrete vaya a entrevistarse con Mariano Pérez de Ayala?

R. Es una consecuencia de mi gestión. A mí se me encargó que resolviera la cuestión interna, y resuelta está . A mí se me encargó también que resolviera la cuestión de los socios, y se va a resolver, tanto mediante contactos entre los secretarios provinciales como con contactos dentro del propio gobierno. Por tanto, la reunión de Pérez de Ayala con Navarrete, y la que yo tendré con Carrillo y Vivancos son consecuencia de ese encargo. Y estos contactos se iniciarán el mismo lunes (por mañana), no hay que esperar más.

P. ¿Cómo interpreta el peso que tiene en el Ayuntamiento de Sevilla un grupo minoritario como el PA?

R. Es una realidad política. El PA es la llave, sea más grande o más pequeña, y es la que termina abriendo las puertas. Pero lo fundamental es que entremos en una dinámica en la que no se miren las cosas desde una perpectiva de interés tan partidista, de buscar rentabilidad personal. Es más interesante trabajar conjuntamente, aportando lo que cada cual tiene, y luego sacar una rentabilidad común.