Yahoo! revisa a la baja sus resultados e inicia la búsqueda de un nuevo jefe ejecutivo

Tim Koogle, el jefe ejecutivo que dirigió la extraordinaria expansión de Yahoo! entre 1996 y 1999, dejará las riendas de la compañía. El propio Koogle hizo saber que se había encargado a una empresa de cazatalentos la búsqueda de su sucesor, y que él permanecería al frente de Yahoo! hasta que llegara el relevo. Luego pasaría a la presidencia para seguir manteniendo "un papel activo".

"Todos los negocios en Estados Unidos", decía un comunicado de la empresa, "se enfrentan a unas difíciles condiciones económicas que han empeorado en las últimas semanas, y conforme la confianza de los consumidores y el nivel de gasto se deterioran, nuestros clientes han paralizado sus inversiones en todo tipo de medios de comunicación hasta que las perspectivas mejoren". Yahoo! obtenía gran parte de sus ingresos publicitarios de otras compañías de Internet. Con el sector bajo mínimos, esos anuncios han desaparecido.

Yahoo! anunció también que recompraría parte de sus acciones en Bolsa, en una operación cercana a los 500 millones de dólares, para evitar que la cotización siguiera desplomándose. En los apenas 10 minutos iniciales de la sesión de ayer, las acciones perdieron el 6,12% de su valor. Las autoridades bursátiles decidieron suspender la cotización, pero las acciones de Yahoo! volvieron a negociarse a última hora de la tarde, fuera del mercado, después de la conferencia de prensa de Koogle y los demás directivos. El precio siguió cayendo: comenzaron el dia a 22,5 dólares, quedaron suspendidas a 20,9, y al conocerse las noticias se vendían a 17 dólares.

La recompra de acciones por parte de la propia compañía servirá, adicionalmente, para dificultar absorciones hostiles. El 40% del capital de Yahoo! está en manos de sus fundadores, directivos y empleados, y hace unas semanas ya puso en funcionamiento una serie de mecanismos de defensa contra posibles adquisiciones externas, lo que hace muy difícil su absorción. Pero Yahoo!, que valía 115.000 millones de dólares (unos 20 billones de pesetas) en enero del año pasado, es ahora una ganga: los 565 millones de acciones que tiene en circulación pueden comprarse por menos de 10.000 millones de dólares. Los rumores de que corporaciones como Vivendi Universal o Walt Disney podrían intentar una absorción amistosa son intensos en las últimas semanas.