Ruiz-Gallardón, abucheado por un grupo de bomberos en Pozuelo

La inauguración del nuevo parque de bomberos de Pozuelo (62.000 habitantes) estuvo amenizada por los pitidos y abucheos con los que los bomberos dependientes de la Comunidad recibieron ayer al presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón. Unos 50 representantes de dotaciones de diversas localidades pidieron la dimisión del jefe del cuerpo, Luis Villarroel. También solicitaron una vuelta al sistema anterior, en el que los servicios de emergencia sanitaria (Sercam) y los bomberos estaban integrados.

Hasta hace un año, dentro del cuerpo había especialistas sanitarios -médicos y enfermeros-, que también eran bomberos, hasta que se decidió segregarlos y que pasaran a depender de la Consejería de Sanidad.

Damián Rodríguez, portavoz de Comisiones Obreras, explica que con el nuevo sistema se ha roto la coordinación, de forma que los servicios sanitarios y los bomberos no llegan al mismo tiempo al lugar del accidente. 'Así se pierden dos o tres minutos, que en una parada cardiorrespiratoria significa la muerte', explica.

Por su parte, Eduardo San Román, director general de Protección Ciudadana, aclaró que, cuando se transfieran las competencias del Insalud a la Comunidad, existirá un servicio integral de todas las asistencias sanitarias.