DÉCIMOS POLÉMICOS

Un informe jurídico revelará si el presidente de la Diputación de Segovia, Atilano Soto, del PP, tendrá que ingresar en las arcas provinciales los 30 millones de pesetas que le tocaron en el gordo de Navidad por un décimo que le habían regalado en calidad de miembro del Patronato del Alcázar, que hizo millonarios desde a su presidente, el general Antonio Alonso Molinero, hasta el último empleado. Mientras que la junta de personal y el comité de empresa de la institución aseguran que el premio debe destinarse para ampliar la plantilla, argumentando que Soto está en este organismo como representante de la institución, según informó ayer El Norte de Castilla, personas de su entorno opinan que se trataba de un regalo a título personal, por un valor de 3.000 pesetas, como un bolígrafo o una carpeta, aunque luego tuvo la suerte de ser agraciado. De momento, el portavoz de la oposición y secretario provincial del PSOE, David Rubio, insiste en que hay que ser prudente con este tema y no hacer demagogia, mientras argumenta que serán escrupulosos con la legalidad. Su compañero socialista en el Ayuntamiento, Ángel García Cantalejo, opina que no hay que hacer con esto una cuestión política de la ciudad, pues fue agraciado con otros 30 millones el alcalde, José Antonio López Arranz, de UC-CDS, también en calidad de patrono, y considera que no hay ilegalidad, por lo que deja la decisión final a merced de lo que decidan personalmente y en conciencia estos políticos.-