Las dos firmas piden las mismas condiciones para todos

A pesar de que desde que comenzó el año se han multiplicado las especulaciones sobre el futuro de la fusión resultará, los dos protagonistas de la operación creen que el escenario no ha cambiado desde que la Comisión Nacional de Energía (CNE) emitiera su informe. En éste se pide que la cuota de participación en distribución se reduzca al 41% o al 62% siempre que esté controlada por un gestor independiente durante un periodo de transición.

Entonces los consejeros delegados tanto de Endesa, Rafael Miranda, como de Iberdrola, Javier Herrero, ya advirtieron de que si las condiciones sobre desinversión y venta de activos se endurecen excesivamente no tendría sentido la fusión. Según fuentes de estas eléctricas, en todos los informes sobre la operación -CNE, TDC y, el único determinante, el del Gobierno- a la hora de imponer condiciones se debería 'medir a todo el sector por el mismo rasero'.

En concreto, se recuerda que si se exige que se reduzca la presencia de la nueva empresa fusionada en un determinado ámbito geográfico, por ejemplo en Andalucía, se debería aplicar ese mismo baremo, por ejemplo, a Fenosa, en Galicia, o a Cantábrico, en Asturias. Por eso, en fuentes de las compañías eléctricas precisaron que las condiciones que se impongan deberían tener carácter general.