'Los autores sin sentido del humor me provocan cierto rechazo'

Lorenzo Silva nació en Madrid en 1966, hace honor a su fama de persona amable y sencilla, y además está en racha. Finalista del Premio Nadal en 1997 con La flaqueza del bolchevique, consiguió al fin obtener este galardón tres años después con El alquimista impaciente. Otros títulos suyos son Noviembre sin violetas, La sustancia interior, El lejano país de los estanques y El ángel oculto. Además, frecuenta la literatura juvenil.

Pregunta. Dicen que es usted el escritor más prolífico de su generación, ¿eso es un piropo o un insulto?

Respuesta. Hombre, lo de prolífico suele usarse en el mal sentido. Aún así, no creo que yo sea el que más escribe y tampoco me preocupa mucho. Lo único que quiero es que cada libro mío tenga algún sentido, meditarlos muchos y no hacerlos como churros. Hasta ahora he conseguido estar en paz con mi conciencia.

P. Eso coincide con su fama de alquimista paciente.

R. Sí, soy un alquimista muy paciente, llevo 20 años escribiendo y he tardado 15 en publicar mi primer libro. La gente sólo se fija en lo que está visible, pero he permanecido 15 años invisible.

P. Dice Javier Reverte que 'los libros se escriben con el culo'. ¿Es sólo cuestión de echar horas?

R. Hay también momentos especialmente inspirados. Pero la inspiración hay que organizársela un poco. Si sólo tienes inspiración saldrá una mala novela.

P. Cumplido el reto del Nadal, ¿tiene alguna otra ambición en lo que a premios se refiere?

R. La verdad es que nunca he tenido ninguna ambición concreta. El Nadal simplemente me apetecía y me parecía que podía ser bueno para mi carrera. Insisto en que mi objetivo es escribir lo mejor posible y estar razonablemente a gusto con lo que hago.

P. ¿Qué importancia da al humor en la literatura?

R. Como lector, distingo entre escritores con sentido del humor y escritores que carecen de él. Estos últimos suelen provocarme cierto rechazo.

P. ¿La trama criminal de su última novela es un guiño a ese género negro que nunca ha tenido en España el predicamento que merece?

R. Así es, pero no sólo en España. En Estados Unidos, gente como Hammet o Chandler tuvieron su prestigio a posteriori. Yo reivindico mucho la novela policíaca, porque además de haberme hecho disfrutar mucho me ha enseñado muchas cosas del mundo en el que vivo. No me importaría nada correr la misma suerte que alguno de estos autores. Poder escribir, por ejemplo, historias tan estimulantes como las de Chandler.