Visiones de John Lennon

Nueva York, Central Park, 8 de diciembre de 1980. Al caer la tarde, un desquiciado coleccionista de autógrafos aguarda frente al edificio Dakota, y cuando ve que John Lennon se baja de una limusina negra le dispara a bocajarro justo a la puerta de su casa. Cuando se cumplen 20 años de este asesinato que conmocionó al mundo musical, el medio televisivo evoca al famoso ex Beatle.Canal + consagra hoy su programación de tarde -con reportajes y diversas piezas musicales que se irán intercalando a lo largo de toda la parrilla- al recuerdo de este artista. El Nueva York de John Lennon es el tema de un especial, realizado por la cadena informativa CNN+ (19.25), con el corresponsal Rafael de Miguel buscando las huellas del músico por la ciudad que le acogió durante los años setenta. El otro programa de producción propia de Canal + es John Lennon, veinte años después (19.35), donde varios periodistas españoles afines a Los Beatles, reforzados por el cantante Miguel Ríos y el sociólogo Fermín Bauzá, especulan sobre la personalidad y la vida del desaparecido artista. Una vez más se aprecia que la hostilidad hacia Yoko Ono sigue viva.

Yoko Ono Lennon (así firma) es precisamente la productora ejecutiva de John Lennon: sin cielo y sin infierno (18.28), un extraordinario documental de Andrew Solt sobre la grabación de Imagine, que se beneficia de que John y Yoko contrataran a un equipo de cine para que les siguiera durante varias semanas de la primera mitad de 1971. Las tomas del estudio son especialmente reveladoras: John acepta los consejos de su esposa, mientras que el productor oficial, un encorbatado Phil Spector, es una presencia lacónica, poco más que un ingeniero de sonido.

Aparte de la elaboración de la empalagosa Imagine, destaca la grabación de How do you sleep, venenoso mensaje para Paul McCartney, con George Harrison y otros instrumentistas impertérritos ante la barbaridad. No obstante, Lennon aparece distendido y bromista, sólo irritado ante el tedio de repetir voces, fieramente consagrado a plasmar sus canciones. Pero Sin cielo y sin infierno también retrata a Lennon como líder generacional. Recibe a Régis Debray, Tarik Alí y otras luminarias de la nueva izquierda, que dan su aprobación a Imagine, en su dimensión de himno utópico. Acude a una manifestación y a una firma de libros. Se deja entrevistar sobre el sexo y el amor. Dirige el montaje de una casita prefabricada en una isla dentro de su finca. Organiza una fiesta con famosos -Miles Davis, Andy Warhol, Jack Nicholson- que filma (torpemente) Jonas Mekas... El momento más tenso ocurre cuando se enfrenta a un joven hippy que ha llegado hasta su mansión convencido de que las letras de Los Beatles le hablan directamente. Lennon le quita ilusiones y desactiva el enfrentamiento invitándole a comer algo caliente. Nueve años después, ya en Nueva York, se le acercaría otro freak, éste nada desaliñado, pero con una pistola cargada.

El recordatorio televisivo de Lennon continúa por la noche en el canal Gran Vía (plataformas de satélite Vía Digital y Quiero) con los documentales Imagina, recuerda: John Lennon (22.00) y Beatles en España (23.00), una producción del realizador Pedro Costa.