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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Diálogo

Pensar, razonar, dialogar o comunicar son cualidades dadas al hombre por encima de los animales. La problemática se genera cuando ciertas personas no tienen escritas dichas palabras en su diccionario moral. ETA, maltratadores de mujeres, explotadores... son estas las personas, son estos los irracionales, son los que no hacen uso de la razón.He empezado por pensar y razonar, que viene a ser lo mismo. Me refiero a actuar de acuerdo con los resultados que se pueden obtener, de nada sirve confesar un crimen cuando éste ya ha sido realizado, de poco sirve avisar de una bomba cuando el pensamiento del que llama ya clama a favor de la muerte, de nada sirve disparar y después apuntar.

Dialogar, éste es el espíritu de Ernest Lluch. ¡Qué gran hombre el que clamaba por el diálogo cuando unos terroristas tachaban su nombre en una inmensa lista de posibles blancos! Lo mataron, pero venció, y venció a los asesinos, porque tenían miedo de él, de que él fuera más, de que pensara más, de que con su grito de diálogo se pudiera acabar lo que ellos buscaban, ellos eran unos cobardes, lo mataron por la espalda y para dialogar se mira a la cara. No osaron hacerlo porque sabían que si lo hacían no perpetrarían el crimen que convierte en ídolo a un héroe, un ejemplo, un ser racional.

Y concluyo con la palabra comunicar, porque esto es lo que hicieron las 900.000 personas que salieron a la calle. Comunican a los terroristas las ganas de vivir en paz, el deseo de que cesen en su intento inútil de utopía vasca, el sueño de que algun día razonen.- Oriol Alós Majó. Arenys de Munt.

¿Os felicitáis cuando vuestros alumnos obtienen un éxito? Porque vosotros, como buenos maestros, supongo que os alegráis de tales triunfos, ¿o sois simplemente manipuladores de mentes débiles y enfermas? En cualquier caso, enhorabuena, lo habéis conseguido, os tenemos miedo; será lo único que conseguiréis.

Recordad: podemos estar asustados, pero no vencidos.- Miguel Montoliu. Barcelona.

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