Renovadores y guerristas se atribuyen el triunfo del segundo día de elecciones

La segunda jornada de elección de delegados para el próximo congreso regional del PSOE, que se celebrará a partir del 24 de noviembre, arrojó un empate entre las distintas familias en liza, a juzgar por los datos que facilitaron sus respectivos representantes. Tanto el sector renovador (dividido entre renovadores por la base y renovadores clásicos, y sin un candidato claro para secretario general) como los guerristas se atribuyeron el triunfo en las 16 agrupaciones que ayer eligieron a sus delegados.

Presentación de Sabando

Los 660 delegados que resulten elegidos estos días en las 148 agrupaciones de la región serán los encargados de elegir a un nuevo equipo dirigente para la FSM -controlada desde 1997 por los renovadores- los próximos 24, 25 y 26 de noviembre. Los candidatos son cinco: José Acosta (cabeza del sector guerrista), José Antonio Díaz (apoyado sobre todo por los llamados renovadores por la base), Jesús González Amuchástegui (secundado por el rector de la Universidad Carlos III, Gregorio Peces-Barba), el diputado regional Antonio Carmona (renovador) y el portavoz socialista en la Asamblea madrileña, Pedro Sabando (que se presenta como "hombre de consenso" entre las diferentes familias de la FSM). El proceso de elección de delegados se inició el pasado jueves y continuará hasta el próximo miércoles. Ayer les llegó el turno a 16 agrupaciones, pero los resultados de estas votaciones difieren según se atienda a una u otra corriente. Los guerristas aseguran que, de un total de 29 delegados elegidos, 15 lo fueron por la lista de Acosta, otros 11 por la de los renovadores clásicos y tres más por la que presentaban los renovadores por la base. Señalan además que en las tres agrupaciones más importantes -la Agrupación Socialista Universitaria (ASU), Arganda y Parla- sus representantes han superado ampliamente a los del sector renovador (10 delegados frente a 4).

Los renovadores por la base, por su parte, sostienen que los delegados elegidos ayer son 37, y los desglosan de esta manera: 22 renovadores (por la base y clásicos) y 15 del sector guerrista. Los renovadores por la base están convencidos de que todos los renovadores, sean de la corriente que sean, votarán al aspirante José Antonio Díaz; pero los renovadores clásicos, profundamente divididos aunque mayoritarios en este grupo, advierten de que no han decidido aún cuál es su candidato. "Tenemos claro que no votaremos ni a Acosta ni a Pedro Sabando, pero entre el resto de aspirantes todavía no sabemos a cuál apoyar", explicaba ayer uno de ellos.

Precisamente el portavoz socialista en la Asamblea presentó ayer formalmente su candidatura para ser el próximo secretario general de la FSM. Sabando eligió para la ocasión el salón de actos del Ayuntamiento de Fuenlabrada, en el que se congregaron unos doscientos militantes de la zona sur. El portavoz del PSOE, que se definió en todo momento como socialdemócrata, aseguró, sin embargo, que se retirará de la carrera electoral en caso de que surja un candidato de consenso que aglutine a todas las corrientes. También afirmó que, si el congreso de la Federación Socialista sale mal, "se habrá puesto el último ladrillo del edificio de la derrota en las elecciones de 2003". Sabando afirmó que la FSM ha perdido, al igual que la federación valenciana, todo su peso político dentro del PSOE, a pesar de haber sido una de las más importantes de ese partido. Para recuperar ese peso y alcanzar además el Gobierno regional y el municipal, pidió "reconstruir la confianza de los electores". "La división interna de este partido no puede proseguir si no queremos ir a la catástrofe. Necesitamos un congreso de punto y aparte. Yo apoyaré a una persona de consenso", aseguró.

El quinto candidato a dirigir la FSM repasó ante el auditorio su currículo para demostrar la experiencia adquirida en estos años: recordó que ejerció como subsecretario de Estado en el primer Gobierno de Felipe González, que presidió la Organización Mundial de la Salud en Europa, que fue consejero de Sanidad con el ex presidente de la Comunidad Joaquín Leguina y que, además de diputado regional, es senador.