Los tres mediofondistas españoles, a semifinales

Lamela, eliminado

Los tres mediofondistas españoles -Andrés Díaz, José Antonio Redolat y Juan Carlos Higuero- se clasificaron para las semifinales de 1.500 metros, que se cobraron algunas víctimas imprevistas, caso del keniano William Chirchir y el portugués Rui Silva.La primera eliminatoria del 1.500 metros fue sencilla para los atletas españoles, que siempre estuvieron atentos a los movimientos en unas carreras tácticas. En la primera serie, el valenciano Redolat decidió correr por la cuerda, en segunda posición, para no verse envuelto en conflictos. Los parciales le favorecían, puesto que Redolat es un atleta que se maneja con seguridad alrededor de los 3,37 minutos.

Su interés estuvo en vigilar los movimientos de El Guerruj, que tomó el mando de las operaciones tras el paso por los 800 metros. De manera gradual, aceleró el ritmo y dejó una fila de atletas por detrás. Redolat dio una sensación evidente de comodidad. Siguió la estela del marroquí y terminó en segunda posición, con un registro de 3.38.58 minutos y un bello gesto por parte de El Guerruj, que, al llegar a la meta, tendió la mano a Redolat.

Por su inexperiencia, había alguna duda sobre la respuesta de Juan Carlos Higuero, atleta que hasta el momento no ha sido probado en la gran competición. Higuero no se dejó impresionar por el acontecimiento y alcanzó el tercer puesto, después de una prueba que también se adaptó a sus condiciones. A falta de 400 metros, surgió desde atrás y comenzó a desbordar rivales. En la curva final ya estaba perfectamente colocado. Y como velocidad no le falta al atleta burgalés, remató la carrera sin problemas, por detrás del keniano Lagat y el marroquí Baala.

La serie de Andrés Díaz parecía más complicada, con la presencia del keniano Ngeny, del argelino Morceli y del portuguués Rui Silva, subcampeón de Europa en 1998. Díaz ha tenido problemas con una tendinitis que le obligó a abandonar en la final del campeonato de España. Sin embargo, pareció recuperado. Un tropezón con Morceli a falta de 350 metros fue su única complicación, pero Díaz aprovechó envergadura para desplazar al argelino y hacerse con el hueco preciso para vigilar Ngeny, que se dio un paseo. Con 3.38.04, el español terminó en tercera posición.

Yago Lamela no consiguió en la madrugada de hoy (hora española) clasificarse para la final de salto de longitud. Después de tres intentos, sólo alcanzó 7,89 metros, muy lejos de los 8,15 metros exigidos para clasificarse automáticamente, aunque con 8 le habría sido suficiente. El mejor salto de la jornada lo protagonizó el cubano Iván Pedroso, el campeón del mundo, que llegó a 8,32 metros.