Sainz está a 90 kilómetros de su primer triunfo en más de dos años
A Carlos Sainz (Ford) le quedan apenas 90 kilómetros para deshacerse del mal sabor de boca que arrastra hace tiempo. Son seis tramos cronometrados en la última etapa del Rally de Chipre en los que el español cruzará los dedos, tocará madera, y hará lo necesario para que el infortunio se aleje de su lado. Sólo ese factor incontrolable puede impedir su primera victoria en más de dos años, que le supondrá también volver a integrarse en la lucha por el título. Sainz afronta la jornada final con más de un minuto de ventaja sobre su compañero Colin McRae."No veo la hora de llegar a la meta", reconoció el madrileño, que sólo fue el más rápido en uno de los ocho tramos de ayer y pudo mostrarse conservador gracias a la ventaja adquirida el primer día. "Pero queda camino por recorrer y este rally es duro. Además, ya perdí un Mundial a 300 metros del final en 1998, o sea que sé que las sorpresas pueden ocurrir en cualquier momento". Su último triunfo en una prueba del Mundial se remonta también a aquella fatídica temporada 1998, cuando ganó el Rally de Nueva Zelanda.
La situación de Sainz para hoy resulta ideal. El segundo clasificado es su compañero de equipo McRae, que está a 1m.4s. y que no le atacará porque el tercero, el francés François Delecour (Peugeot), acabó anoche a 2m.1s. del madrileño. Todo apunta al doblete de Ford. Así la marca se consolidaría al frente del Mundial de constructores y sus dos pilotos ganarían muchos enteros en la clasificación individual pues el líder, Marcus Gronholm (Peugeot), abandonó, y el inglés Richard Burns (Subaru) ha descendido al cuarto puesto, a 2m.46s. de Sainz. Toni Gardemeister (Seat), accidentado, abandonó.
