Dempsey confirma que fue amenazado antes de votar

El hombre que polariza la polémica sobre la atribución del Mundial 2006 de fútbol a Alemania frente a la candidatura de Suráfrica, el neozelandés Charles Dempsey, presidente de la Confederación de Oceanía, confirmó ayer al llegar a Auckland que fue amenazado antes de la votación. Dempsey se abstuvo al final, y con ello la victoria fue para Alemania por un solo voto de diferencia (12-11).

Si Dempsey hubiera votado a favor de Sudáfrica, el empate se hubiera saldado en favor de los africanos debido al voto de calidad del presidente de la FIFA, Joseph Blatter. "Fui amenazado, pero nunca dije que recibiera amenazas de muerte", declaró. El portavoz de la FIFA, Keith Cooper, había declarado que Dempsey recibió amenazas de muerte, pero la FIFA rectificó luego estas declaraciones. "Recibí solamente llamadas telefónicas. Era una situación terrible. Nunca viví tal presión", explicó Dempsey."Me doy cuenta de que esto tiene repercusiones internacionales, pero tomé la buena decisión y lo explicaré mañana" a los responsables de la Federación de Fútbol de Oceanía, dijo. "Recibí un consejo muy acuciante en el sentido de que era lo mejor. Fuera cual fuera mi voto, yo no tenía ninguna manera de ganar. Estaba en la situación de un perdedor". "Estos cuatro últimos días han sido muy difíciles", añadió. Dempsey salió del aeropuerto de Auckland por una puerta trasera evitando a la multitud de periodistas que lo aguardaban. "El lunes lo explicaré todo", añadió Dempsey, que hoy tiene intención de reunirse con los responsables de la Confederación de Oceanía de fútbol antes de la conferencia de prensa en la que mañana explicará las razones de su abstención.