200 familiares de Jonathan acuden desde otras regiones para buscar al niño
Seis días después de la desaparición de Jonathan, la familia Barrull ha organizado su propia búsqueda para localizar al niño de tres años que desapareció el sábado pasado en un centro comercial de San Fernando de Henares. Unos 200 familiares del pequeño se han movilizado por el este de la región en busca del chiquillo. La policía prosigue su investigación, pero carece de pistas del paradero.
El poblado de Las Castellanas de San Fernando de Henares donde viven unas 20 familias en infraviviendas, está revuelto por la desaparición de Jonathan. En los últimos días registra un continuo movimiento de vehículos. Son coches y furgonetas que sólo vienen de visita en las ocasiones especiales, sobre todo en celebraciones familiares. Esta vez no han venido para un festejo, sino para formar parte de un equipo improvisado de búsqueda que peina las calles de las localidades del este de la región para tratar de localizar al niño.Día y noche, cerca de 200 familiares, llegados a Madrid desde Sevilla, Málaga, Barcelona, Oviedo y Guadalajara, tratan de localizar a Jonathan. "Está toda la familia unida y han venido de toda España para buscar al Chucky" -apelativo cariñoso que le han puesto a Jonathan porque, según sus familiares, se parece a Chucky, el muñeco diabólico, un personaje del cine de terror-, según afirmó ayer Inmaculada Carbonell Heredia, de 38 años, abuela del niño. "Vienen todos juntos y cada tío tiene siete u ocho primos...", explicó. "Hemos puesto carteles con nuestros teléfonos por Madrid y localidades de los alrededores para ver si alguien le ve y nos llama", comenta Carbonell.
La abuela está "fatal", según admite, y se teme lo peor: "Esto ya es muy raro. No sabemos nada de él, nadie nos llama diciendo que lo ha visto... Para mí que se lo ha llevado alguien sin hijos, que no los puede tener y que quiere adoptarlos", lamenta. "Mi Rosi" -por Rosa Barrull Lozano, de 21 años, madre del pequeño, que tiene otros dos hijos- "tiene esperanzas de que le encuentren, pero yo ya me imagino muchas cosas raras", agrega.
La madre y la abuela apenas duermen. "De noche nos sentamos en la puerta -de la infravivienda- y salimos a la carretera en cuanto oímos a un coche venir, para ver si ahí llega el pequeño", explica Carbonell. El río Jarama, que discurre cerca del poblado, ha sido rastreado sin éxito.
Los teléfonos de contacto con la familia de Jonathan son: 91 674 02 41 y 91 669 58 56.
