Tres asociaciones de Valdebernardo denuncian la falta de plazas escolares

Valdebernardo (un barrio al noreste de Madrid, de unas 6.000 viviendas) busca plazas escolares. Las dos asociaciaciones de vecinos (AFUVEVA y ASCOVA) y la asociación de padres del Valdebernardo I, el único colegio de titularidad pública que existe en la zona, se han puesto manos a la obra para que el próximo curso esté funcionando el centro escolar de primaria que debería haber echado a andar durante el presente. Según denunciaron, unas 200 familias tienen que llevar a sus hijos fuera del barrio a falta de plazas escolares en el área.Amador Sánchez, director general de Centros, reconoció que es uno de "los puntos negros" donde a principios de este curso se produjeron incidentes. "El Valdebernardo II estaba en la programación del Ministerio, pero finalmente no se terminó para este curso", se disculpó Sánchez, quien aseguró que para el próximo curso ya estará construido. Lo cierto es que el Valdebernardo I, un colegio que lleva funcionando dos cursos, ha sufrido las consecuencias de la falta de planificación de la administración y ha tenido que escolarizar a los niños que se preinscribieron en el que no se llegó a construir. Resultado: se han visto obligados a reconvertir todo el espacio en aulas improvisadas y superan la ratio con creces en el ciclo de infantil (de tres a seis años).

Pero lo que peor ha caído entre los padres es que a mitad de curso la Consejería de Educación aprobara subvencionar a El Valle, un nuevo colegio de titularidad privada que tienen enfrente, y lo hiciera gratuito devolviendo el dinero a los padres con carácter retroactivo. De esta forma, dicen, el centro seleccionó a su alumnado y el Valdebernardo I ha tenido que escolarizar a todos los chavales con necesidades de compensación (inmigrantes y gitanos) de la zona. De hecho, representan un 20% del total de los alumnos de este centro.

Sánchez se defendió y aseguró que los conciertos educativos "sólo se dan una vez que el centro esté funcionando" y "que es imposible concertar un colegio con las aulas vacías". Reconoció, eso sí, que es "difícilmente salvable" que este centro, que echó a andar como privado, haya seleccionado a su alumnado.