Nueve muertos en las carreteras catalanas en el puente de mayo

Nueve personas murieron y otras siete resultaron heridas de gravedad en los siete accidentes mortales que se habían producido al cierre de esta edición en las carreteras catalanas en el puente del Primero de Mayo. Dos de los accidentes mortales ocurrieron en Tarragona, otros dos en Barcelona, dos más en Lleida y uno en la provincia de Girona. Por otra parte, la operación retorno del puente del Primero de Mayo no fue demasiado complicada para acceder a Barcelona y el resto de las ciudades catalanas, según fuentes de la Dirección General de Tráfico. El tráfico fue ayer intenso pero fluido. Las retenciones fueron esporádicas y se produjeron en los mismos puntos que en los fines de semana.

Hacia las ocho de la tarde la carretera que registraba mayor densidad de tráfico era la C-240, en Montblanc, donde había unos ocho kilómetros de retención, seguida de la N-340, en Coma-ruga, donde había unos seis kilómetros. En la A-7, en Vilafranca del Penedès, y en la N-II, a la altura de Jorba, se registraban unos tres kilómetros de retenciones. En la A-19, en Mataró, y en la C-253, en Vidreres, también se formaron unos dos kilómetros de cola.

En Lleida una persona falleció y otras tres resultaron heridas en una colisión frontal entre dos turismos ocurrida en la C-1313, a su paso por La Seu d'Urgell, sobre las nueve de la mañana. Las causas aún no han sido especificadas, según fuentes de los Bomberos de la Generalitat. Otro de los accidentes mortales se produjo hacia las siete de la mañana en la A-7, en el término municipal de Aiguaviva (Girona), donde un joven falleció y otros dos resultaron heridos de gravedad cuando el coche en el que viajaban se incendió y posteriormente chocó contra la valla de protección.

Las medidas especiales para regular los desplazamientos de este puente, que se pusieron en marcha el pasado viernes a las tres de la tarde y se prolongaron hasta las ocho de la tarde de ayer, movilizaron a numerosos efectivos de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Civil de Tráfico, que habilitaron carriles especiales para el retorno.