La libreta de Conxa

"Un artículo de Manuel Vázquez Montalbán hace pocos días en este diario me hizo caer en la cuenta de que vivimos en un país donde la gente se ha creído que lo más importante de lo que sucede está encerrado en sendas libretas: el cuaderno azul de José María Aznar y el poemario secreto del tal Van Gaal del Barça. A la gente le encantan los cuentos chinos, pero es asombroso el nivel de papanatismo que estáis alcanzando los periodistas y fauna adjunta. Me perdonarás la presunción, pero los publicitarios de raza nos anticipamos siempre a vuestros descubrimientos... imagino que te interesará, pues, saber que mi diario auténtico, más allá de lo que reproduces en esta columna, forma parte de una libreta secreta de la que ahora, dado que ha sido Semana Santa y hoy es el Día del Libro (no me negarás la oportunidad de la cosa), voy a seleccionarte unos fragmentos".La libreta de Conxa, con la cubierta a topos, me llegó pulcramente envuelta en celofán, vía Internet y con esta anotación en la tapa: "Los treintañeros llevamos la libreta en el móvil, en el ordenador y en la cabeza. Como tenemos la memoria intacta, no necesitamos bolígrafo". Toda una declaración de principios.

El voluminoso lote de páginas enviado por Conxa excede, con mucho, el espacio disponible, por lo que extracto algunos párrafos significativos que ilustran la historia y el pensamiento de esta chica.

"Libreta. Instrumento privado de sinceridad total. En cuanto sale a la luz es puro exhibicionismo e instrumento de propaganda. Conclusión: nunca dejaré que mi libreta secreta circule por los periódicos".

"Cinismo. Juego ultramoderno que consiste en enseñar la libreta y esconderla rápidamente. Cuando uno lleva una libreta en la mano y luego la oculta se le mira con mucho respeto. (Comprobado en los casos de Aznar y Van Gaal). Valor en alza".

"Síndrome de Estocolmo. Lo que las mujeres sentimos hoy por los hombres: no conseguimos librarnos de ellos. Fue lo que me pasó con Gorka, me maravilló su nacionalismo / global y su falta de interés por el sexo. Me fascina el absurdo, es decir, casi todo. Por eso cada día me engancho más a los periódicos".

"Nacionalismo.Proyección utópica y antigua de la virilidad más recalcitrante. Hoy se complementa con la gran epopeya machista de la globalidad única. (Totalmente prohibido hacer mención de este tipo de pensamientos que traspasan toda la publicidad contemporánea)".

"Marujeo. Afición intelectual común en varones dedicados a las letras o a la filosofía que viven pendientes del '¿qué me pongo?', de acuerdo con las instrucciones emanadas desde la Alta Costura del pensamiento. El marujeo intelectual vive del qué dirán (los suplementos culturales, por ejemplo) y de las tendencias de la moda sobre las ideas política y culturalmente correctas, que son mucho más fáciles de seguir las andanzas de Rociito. Pobres, les he visto sufrir mucho por causa de este papanatismo (véase el Josep del 2004) que hace de ellos unos extraordinarios clientes de la publicidad y la propaganda".

"Josep del 2004. Papanatas integral, según modelo barcelonés auténticamente posolímpico y pujolista. Una plaga". (Y aquí Conxa largaba una lista de nombres muy conocidos que integrarían esta categoría de hombre barcelonés actual. Por razones obvias, me abstengo de reproducirla).

"Nasdaq. Mi amigo egipcio / madrileño, creador de eslóganes para parques de atracciones, tiene mucho morbo, además de un nombre mágico. Piel morena y ojos claros. Uf. Me pone a cien".

La libreta de Conxa es una pequeña joya en clave Conxa. La llamé para agradecerle el envío y la encontré en casa poniendo orden ante la inminente llegada a Barcelona de Nasdaq. "¡Ya ves que en cuestión de libretas no todo está dicho! ¿Qué crees que pueden apuntar en la suya Aznar y Van Gaal? Agradéceme la exclusiva y deséame suerte con Nasdaq".

Así lo hice. (Continuará)

Resumen de lo publicado: Conxa, treintañera barcelonesa de identidad múltiple y viva inteligencia, trabaja en publicidad y aporta su diario a una investigación sobre el treintañerismo en la España de Aznar. Su búsqueda de la verdad y el amor han dado pie a episodios flagrantemente contradictorios y desconcertantes hasta ahora.