Los porteros destacaron en el empate del Málaga en Oviedo

En tarde pletórica de porteros, Oviedo y Málaga depararon un partido movido y nervioso. Decidieron las defensas de mantequilla y las acciones a balón parado, una suerte ésta que domina el oviedista Pompei. El guante que tiene el argentino por pierna izquierda le dio al Oviedo por dos veces la llave del triunfo, gracias a sendos cabezazos de Boris y Rubén, ante una permisiva zaga andaluza. El Málaga, un equipo de recursos ofensivos, con un buen repertorio en el juego entre líneas, perdió parte del botín por su endeblez defensiva, un mal que también padeció el Oviedo, como quedó patente en los dos goles que regaló.La agresión de Darío Silva

El uruguayo Darío Silva se trae de vuelta de Oviedo una denuncia por agresión. Al término del partido, cuando la expedición del Málaga abandonaba en el autobús en Carlos Tartiere, Darío Silva se apeó de éste y sin mediar palabra propinó un puñetazo en el rostro a un aficionado del Oviedo que, según la versión del futbolista, le insultó reiteradamente, profiriendo insultos de tinte racista. "A mí sólo me llaman negro mis amigos y lo hacen de forma cariñosa", alegó el delantero malaguista para justificar lo airada de su actuación. El seguidor del Oviedo agredido presentó una denuncia por agresión contra Darío Silva.