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La bella durmiente podrá seguir descansando a pierna suelta si los empleados del histórico Teatro Colón, de Buenos Aires, deciden continuar la huelga que comenzaron hace tres días. Hasta el momento ya se han suspendido las dos funciones del famoso ballet que debía inaugurar la temporada 2000 del teatro más importante de Argentina. Los trabajadores del Colón iniciaron un cese total de actividades para reclamar la incorporación de 299 contratados de la plantilla permanente en un momento más que delicado, ya que faltan sólo dos meses para las elecciones a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Además de hacer peligrar los próximos espectáculos en la agenda del Colón, el conflicto puede dañar la imagen de la fórmula aliancista, que se perfila como ganadora. Alertada del impacto que puede provocar la huelga del Colón, no sólo en la campaña, sino en proyección cultural internacional, la secretaria de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Teresa Anchorena, envió una carta a los trabajadores proponiendo que 212 empleados pasen a la plantilla permanente, pero por concurso. El director del Colón, Juan Carlos Montero, explicó que la situación es grave y agregó que "peligran los próximos conciertos y la inauguración de la temporada de ópera, prevista para el 4 de abril". Fuentes del Gobierno porteño hasta amenazaron con cerrar el teatro.- ,