El PP dice que las elecciones no están ganadas y el PSPV que el 12-M se inicia la "primavera socialista"
Populares y socialistas se intercambiaron ayer los argumentos para movilizar a sus respectivos electorados en las horas previas al cierre de campaña. El presidente del PP en la Comunidad, Eduardo Zaplana, advirtió en un mitin en Alzira que las elecciones no están ganadas y recordó que en 1996 las encuestas les dieron un margen superior y les salvó la campana. Por su parte, el responsable de campaña del PSPV y candidato al Congreso, Francesc Romeu, afirmó, junto a otros candidatos del partido que "de la sensación general ya se puede decir que el próximo día 12 en España comienza una primavera socialista".
Zaplana, en una comida con más de un millar de militantes y simpatizantes de la comarca de La Ribera, elogió la campaña electoral realizada por su formación y dijo que "por primera vez en la historia un partido político ha basado su estrategia en hablar de los hechos y resultados". El dirigente popular calificó la campaña del PP de "razonable y sensata como no se ha hecho nunca en nuestro país" y tachó de "sucia e insultante" la campaña electoral desarrollada por los socialistas, de quienes dijo que han repetido a menudo que eran "progresistas sin explicar lo que defienden". Zaplana desgranó los logros alcanzados en la pasada legislatura por el Gobierno de José María Aznar e hizo hincapié en que el PP ha "enderezado las cuentas de este país", tras recalcar que cerca de dos millones de personas encontraron un puesto de trabajo durante estos años.Dentro de los últimos actos electorales comparecieron el portavoz en el Senado del PP y candidato por Valencia, Esteban González, y el secretario de Relaciones con las Cortes y también aspirante a un escaño en la misma circunscripción, José María Michavila. González reclamó el apoyo de los "votantes valencianistas", porque el PP garantiza la gobernabilidad en términos valencianos, y de los "borrellistas" del PSOE, porque "votar al PP es hacerlo por la renovación socialista y votar al PSOE es hacerlo por la petrificación de ese partido". "La manera de dar un toque al PSOE y de llamar a la renovación es votar al PP", aseguró Esteban González, que añadió que "el efecto Borrell es ahora el efecto Aznar a la hora de lograr un auténtico cambio al frente del PSOE".
El presidente de la gestora del PSPV, Diego Macià, manifestó ayer que los socialistas se han volcado "desde el primer día en la la campaña electoral y han dejado para después de los comicios generales la resolución de la situación de interinidad del partido".
Durante todo el día de ayer, los socialistas insistieron en insuflar optimismo a su electorado para movilizarlo al máximo mañana domingo. Francesc Romeu manifestó que los socialistas "han desarrollado una campaña próxima al electorado, llena de entusiasmo y de ánimo", ya que han llevado su proyecto por toda la Comunidad Valenciana a través de reuniones con colectivos, entidades y la ciudadanía en general.
Inoperatividad popular
Francesc Romeu señaló que los candidatos socialistas "han trabajado duro por todas partes, a diferencia de los candidatos de la derecha, que no han aparecido por miedo a que la ciudadanía conozca su inoperatividad política y programática". En Alicante el cabeza de lista de PSOE-Progresistas al Senado, Ángel Franco, afirmó que el número uno del Partido Popular al Congreso de los Diputados de la circunscripción, Federico Trillo, "debe estar un poquito nervioso porque es consciente de que va a haber una votación masiva y en la provincia de Alicante vamos a dar un sustantivo vuelco".
En términos similares se pronunció el cabeza de cartel al Congreso por Castellón, el socialista Jordi Sevilla, que afirmó: "Si todo el voto de izquierda se moviliza tenemos el tercer diputado al alcance de la mano". "Entre dos y tres mil son los votos que necesitaríamos para tener un tercer diputado" en Castellón, añadió Sevilla.
Por su parte, el coordinador general de Esquerra Unida, Joan Ribó, mostró ayer su satisfacción por no haber retirado la candidatura de Castellón y señaló que "los votos de IU no son sólo para obtener diputados, sino para dar fuerza a unas prácticas políticas". Ribó confió en obtener unos buenos resultados y anunció: "Seremos leales al acuerdo alcanzado con el PSOE pero siempre tiraremos hacia la izquierda", prosiguió Ribó, "y si tenemos una elevada tasa de participación ganaremos las elecciones". "La abstención es votar al PP y estamos hartos de la política del PP", recalcó Ribó.
El coordinador de Esquerra Unida, que se desplazó hasta Castellón para evidenciar que la coalición mantendrá la candidatura electoral hasta el final, también señaló que los dirigentes del Partido Popular y de Convergència i Unió "se avergüenzan de reconocer que tienen un acuerdo político, lo que no ocurre entre el PSOE e Izquierda Unida".
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