Patinazo del Caja El Breogán supo sacar provecho de los hombres de Imbroda
CAJA SANFERNANDO 69- BREOGÁN 77Como si un virus incurable le hubiera atacado, el Caja San Fernando empeoró su juego notablemente contra el Breogán. Parece que la eliminación de la Euroliga ha debilitado al equipo sevillano, sobre todo en la defensa que acusó numerosos errores y un juego sin fluidez. El Breogán se aprovechó de los desatinos del Caja y en la segunda parte vapuleó al equipo sevillano, perdido del todo en la cancha.Turner perdió su condición de salvador -en la primera parte sólo anotó tres puntos- por lo que el técnico cajista, Javier Imbroda, lo sustituyó por Corrales. El Breogán salió sin complejos. Estuvo mandando en el marcador durante todo el partido gracias a los triples de Sergio Luik y la fortaleza bajo el aro del pivot Bonner.
Caja San Fernando: Turner (11), Solana (10), Smith (16), Scott (10), Nacho Romero (8), Fortier (6), Corrales (0), Fernández (5), Cargol (3), Schutte (0) y Salva Díez (0)
Breogán Universidade: Antúnez (9), Odriozola (5), Luik (18), Davis (17), Bonner (12), Sanmartín (7), Urreizti (4) y Legasa (5). Árbitros: Arteaga, Fernández y Ortega. Partido de la 24ª jornada de la Liga ACB. Unos 6.000 espectadores en el Palacio Municipal de Deportes San Pablo de Sevilla.
A pocos minutos del final de la primera parte los jugadores del Caja se movían pesados. Pesaba la derrota del pasado jueves frente al Maccabi. Imbroda movió el banquillo sin lograr superar la falta de ideas. El Breogán, enfrente, entraba con bastante facilidad y consiguió que la primera parte terminase con una ventaja de 32-37.
El público que abarrotó el pabellón San Pablo esperaba la reacción del Caja. Esperanzas vanas. Los de Imbroda se desmoronaron cuando en el minuto 35 el Breogán se iba de 10 puntos (37-47). Los gallegos se crecieron y con el paso de los minutos se volvieron más conservadores en defensa para mantener la ventaja en el marcador.
Hubo un momento para la ilusión sevillana de la mano de Salva Díez. Un esfuerzo tardío. El Breogán jugaba con la absoluta confianza del que va a ganar. El Caja necesita realizar un auto de fe para no dejar escapar la única competición a la que aspira: la Liga.
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