El Salamanca de García Remón se atasca

A Mariano García Remón empiezan a rondarle viejos fantamas familiares. Tiene el técnico madrileño fama de dirigir a equipos que se hunden en las segundas vueltas y los números del Salamanca empiezan a apuntar en esa senda. Iba como un tiro el equipo del Helmántico, que se proclamó campeón de invierno holgadamente, pese a que la mala racha ya había empezado antes del ecuador. Ayer sumó cinco jornadas sin ganar, pero sigue líder gracias al ritmo cansino de sus perseguidores. Quizá al final García Remón rompa el gafe, pero los que le conocieron en Gijón, Albacete y Las Palmas no le auguran demasiados éxitos a la Unión, que ayer cayó en casa frente al Villarreal (0-2).La pasada fue una larga y triste semana para el Tenerife, zarandeado en el campo y en los despachos. Aún no se había apagado la indignación tinerfeña por el arbitraje del derbi perdido frente al Las Palmas cuando llegó la sanción por alineación indebida del canterano Jordi. Los tres puntos descontados por el comité federativo pueden significar el descarte del Tenerife para el ascenso. De repente, el club presidido por Javier Pérez ha pasado de ser un sólido aspirante al ascenso a mezclarse con la clase media-baja de la Segunda. Ayer apenas pudo remediar la situación, ya que el empate en Logroño es muy poco para un equipo que necesita empezar a sumar de tres en tres.

En la isla de al lado, en Gran Canaria, hubo una especie de adelanto de carnaval con las venturas propias y los males ajenos. Pero en el Insular tampoco acabó bien la semana. El pragmático Las Palmas de Sergio Kresic se quedó con dos puntos menos a poco más de 10 minutos para el final, cuando el joven Aítor marcó para el Sporting y enmudeciólos festivos graderíos. Las Palmas y Sporting jugaron un partido de ida y vuelta, que les confirma como aspirantes, por más que el empate frene la escalada de ambos.

El beneficiado de la jornada en la parte alta fue el Extremadura, que con su victoria por la mínima frente al Getafe vuelve a rozar el podio. Dado que el Levante sigue perdiendo fuerza, en las próximas semanas puede quedar perfilado un grupo de cabeza con los nombres más o menos esperados. Ahí aspiran a meterse el Lleida de Víctor Muñoz o el irregular Villarreal, que puso patas arriba el Helmántico.

Por la parte baja destaca el nuevo éxito del filial del Atlético de Madrid, que no para de ganar desde que se produjese la intervención judicial. Ganó en Butarque, pero el tropiezo del Leganés se ha relativizado con los tres puntos de despacho obtenidos frente al Tenerife. La reacción de estos conjuntos madrileños y de otros de la zona peligrosa deja ya bastante descolgados al Toledo y Recreativo, que necesitarían tres triunfos seguidos para reengancharse.