Sólo 350 heroinómanos retiran en farmacias sus dosis de metadona Únicamente pueden acogerse al plan los atendidos por la Comunidad

El plan de administración de metadona en farmacias ayuda a los toxicómanos más integrados a normalizar su vida permitiéndoles acceder a este sustitutivo opiáceo sin desplazarse a los centros dispensadores. Pero al programa, ya de por sí minoritario porque va dirigido a los drogodependientes más estabilizados, sólo pueden entrar heroinómanos atendidos por la Agencia Antidroga de la Comunidad, no los tratados por el Ayuntamiento de Madrid, que deben recoger la metadona en otras unidades de dispensación, normalmente más alejadas de sus domicilios. En la actualidad hay 350.

Esta limitación para la consecución de metadona se debe a que sólo el Gobierno regional que preside Alberto Ruiz-Gallardón firmó, en el año 1997, con el Colegio de Farmacéuticos el consiguiente convenio, después renovado, que hace posible la iniciativa.Sólo 350 de los 7.000 heroinómanos que reciben metadona en Madrid acuden a recogerla a las farmacias acreditadas (hay 105 en toda la región) porque el programa está restringido a aquellos que llevan una vida más estable, con domicilio y trabajo. Al farmacéutico la Comunidad le paga 7.000 pesetas por cada usuario atendido y es el equipo médico y psicológico del centro de atención a drogodependientes el que regula la dosis de metadona que debe recoger cada uno de ellos.

José Cabrera, gerente de la Agencia Antidroga, explica que si el Ayuntamiento no ha firmado un convenio con el Colegio de Farmacéuticos "es porque no lo ha considerado interesante". "No sería lógico que nosotros costeásemos el convenio para que el Ayuntamiento se beneficiase de él sin poner ni un duro", añade.

Los responsables del Plan Municipal contra la Droga, dependiente del Ayuntamiento, reconocen que su programa de metadona sufre cierta "cojera" por no poder ofrecer una dispensación en farmacias. "A los heroinómanos más estabilizados les viene bien no tener que acudir a los centros de drogodependientes a recoger la metadona porque alejarse de ese ambiente les ayuda a normalizar su vida", explican.

"Pero, con la actual normativa, la asistencia a drogodependientes es competencia de las comunidades autónomas, por lo que no tiene sentido que el Ayuntamiento siga creando nuevos recursos", replican fuentes del plan.

Falta de coordinación

Esta situación es sólo un exponente más de la falta de coordinación que existe entre la Agencia Antidroga de la Comunidad y el Plan Municipal contra la Droga del Ayuntamiento. Ambas redes funcionan de forma paralela y los usuarios de cada una de ellas tienen vetado el acceso a los dispositivos de la otra.

Así, por ejemplo, los drogodependientes atendidos por el plan municipal tienen que acudir a recoger sus dosis de metadona a los centros fijos de dispensación de su red o a las furgonetas conocidas como metamóviles que siguen varias rutas por la ciudad. Los de la agencia deben ir a sus propios centros o a los puntos comprendidos en la ruta por la que discurre el autocar conocido como metabús.

Esta exclusividad queda también patente en el nuevo centro de investigación y tratamiento de nuevas adicciones -por ejemplo, como la que supone la combinación de metadona y cocaína- abierto por la Agencia Antidroga en el barrio de Tetuán. A él sólo podrán ser derivados los toxicómanos atendidos por la agencia, no por el Ayuntamiento, cuando problemas como el consumo de cocaína por parte de los usuarios de metadona se dan en todos los centros de atención. Ocurre lo mismo en las comunidades terapéuticas de cada una de las redes.

José Cabrera reconoce esta situación y admite que la agencia se creó para coordinar actuaciones. "Lo ideal es que no hubiera dos redes, pero integrarlas es muy complicado; lo mismo ocurre en Barcelona, donde coexisten una red municipal y otra de la Generalitat. Pero, aunque con problemas, cada vez estamos más coordinados, y como muestra está el convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Madrid, la Comunidad y la Cruz Roja para dispensar metadona, que pronto renovaremos", concluye el gerente.