Toxo desiste de presentar candidatura a la secretaría general de CCOO

Ignacio Fernández Toxo da por cerrada la pugna con José María Fidalgo para la sucesión al frente de CCOO. Tras haber logrado un acuerdo político sobre las ponencias que se debatirán en el congreso de abril, Toxo comunicó ayer a los 40 notables del sindicato (la ejecutiva y los secretarios de federaciones y uniones) que no va a presentar candidatura a la secretaría general para suceder a Antonio Gutiérrez. De esta forma se salva la crisis que ha puesto en peligro la unidad de la mayoría de la central.

Con algunas heridas abiertas y un manifiesto deterioro de las relaciones personales, los dos grupos de dirigentes que habían venido apoyando a Fidalgo y Toxo consiguieron culminar en la tarde de ayer un consenso sobre las principales tesis de las ponencias del congreso, y sobre el modelo con el que se va a gobernar el sindicato. Con ese pacto en la mano, Toxo, que previamente había comunicado su decisión al resto de dirigentes del metal y a los secretarios generales de las federaciones y uniones de su grupo, manifestó ante los 40 notables que desiste de presentar una candidatura alternativa.Esa decisión ha sido fruto de una reflexión personal, que le ha llevado a concluir la pugna abierta el pasado 6 de octubre, cuando se designó sin unanimidad a Fidalgo como candidato oficial. El hecho de que comunicase oficialmente ayer su determinación evita la convocatoria, inicialmente prevista para el próximo martes, de los miembros del consejo confederal encuadrados en la mayoría. Toxo aseguró que ha optado por esta fórmula "para recomponer la unidad de la mayoría", dado que en una votación en el consejo se hubieran manifestado dos bloques muy similares y se hubiesen enconado más las relaciones.

Para Toxo, "el marco en el que se deben restañar definitivamente las heridas" está en los textos pactados. Él no quiere hablar ahora del próximo paso, que es la composición de la futura dirección, y si aceptará participar en ella.

Fidalgo sí abordó ese asunto, y reiteró que quiere contar con "una ejecutiva fuerte y muy representativa", en la que deben estar Toxo, y los otros dos precandidatos, Rodolfo Benito y Fernando Puig. El desde ahora único candidato de la mayoría a la secretaría general no reconoce que se haya producido una grave crisis, "porque no ha habido ruptura en el modelo del sindicato, y porque Toxo siempre manifestó que no encabezaría una quiebra de la mayoría confederal, y lo ha cumplido".

Al margen de lo que cada uno de los dirigentes quiera reconocer sobre la gravedad de la situación que ha atravesado el sindicato en las últimas semanas, lo cierto es que los debates han estado impregnados de una enorme dureza.

Así lo admitió ayer Antonio Gutiérrez, quien aseguró que hubiese sido "una frivolidad conseguir fácilmente un consenso". El actual secretario general cree que la conclusión de la reunión de los 40 dirigentes de la central, y los enconados debates previos de los últimos días, han permitido que "afortunadamente no hayamos llegado a una crisis". Ahora puede ya afirmar que se retira "con confianza y reconocimiento" hacia los dirigentes que toman su relevo.