Editores pioneros en América Latina

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El secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, inauguró ayer Liber, junto a una amplia mesa, en la que se encontraba también el ministro de Educación y Cultura de Argentina, Manuel García Solá. Cortés hizo un discurso eufórico, en el que ensalzó las virtudes del sector editorial, "el más decisivo de la cultura si hablamos de riqueza, empleo, balanza comercial y producto interior bruto". Tras glosar la bonanza de la situación editorial española, Cortés indicó que ese panorama no es fruto del azar, sino del talento y el esfuerzo de los responsables de las editoriales.En ese contexto, Cortés aludió al final de su intervención al espíritu de uno de los pioneros que tendió puentes por el Atlántico entre España e Hispanoamérica, Francisco Pérez González, vicepresidente del Grupo Timón y del Grupo Santillana. Cortés recordó que el Consejo de Ministros le concedió recientemente la Gran Cruz de Alfonso X, precisamente por su capacidad para favorecer la comunicación entre los dos mundos, pero también dentro de este país.

El secretario de Estado pronosticó que la cumbre de La Habana dará pasos firmes hacia la aprobación del mercado común del libro en toda Hispanoamérica, idea que fue propuesta en el congreso de Zacatecas por el propio Francisco Pérez González y Belisario Betancur, y añadió que si eso se produce será gracias "a los editores que en los tiempos en que la política iba por otro lado mantuvieron unidos los lazos con Hispanoamérica".

Por lo demás, Miguel Ángel Cortés felicitó a los asistentes por el volumen de negocio editorial y suscribió las palabras del ministro argentino, que había dicho que el español es un condominio. Una ovación cerrada despidió sus palabras, en una apertura de feria muchísimo más tranquila que la que protagonizó la polémica del precio fijo en 1997.