Ibarretxe insta a Aznar a seguir avanzando en el acercamiento de presos

La postura del lehendakari, Juan José Ibarretxe, sobre la decisión del Gobierno de acercar a 105 presos de ETA apenas difiere de la vertida por los partidos nacionalistas. Primero deslizó una crítica -medida "insuficiente y tardía"- con un tono más suave que el empleado por los dirigentes de su partido, el PNV, y después solicitó a Aznar más pasos en la misma dirección. El obispo José María Setién se limitó a pedir la implicación de los partidos en el proceso de paz.

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, repitió el mismo discurso, con matices más almibarados, que el utilizado por el PNV para enjuiciar el acercamiento de 105 presos de ETA a cárceles del País Vasco o de su entorno ordenado el pasado martes por el Gobierno de José María Aznar. Lejos de emplear términos como "vergonzante" y "cortina de humo", vertidos por el portavoz peneuvista Joseba Egibar al conocerse la decisión, el jefe del Ejecutivo vasco calificó la iniciativa de "insuficiente y tardía", pero añadió a renglón seguido que "se trata de un paso en el que hay que seguir avanzado". Ibarretxe, quien asistió ayer en Oñati (Guipúzcoa) a una misa oficiada por el obispo de San Sebastián, José María Setién, en el Santuario de Aránzazu, se prestó a colaborar con el Gobierno central en la elaboración de una "nueva política penitenciaria flexible, dinámica y consensuada con todas las fuerzas políticas".

El lehendakari abogó por incrementar el número de los traslados de reclusos a prisiones cercanas al País Vasco, para lo cual cree necesario que Aznar "lidere un proceso para dar más pasos en este sentido y, sobre todo, para cumplir las peticiones efectuadas desde el Congreso de los Diputados".

Respecto a la decisión gubernamental, añadió que "no se puede confundir el alto el fuego o la tregua definitiva con la defensa de los derechos de los presos y de los ciudadanos".

El obispo Setién, que ofició la misa en honor a la patrona de Guipúzcoa, dirigió un mensaje a todos los partidos políticos para que "pongan en práctica todos los resortes que tienen en sus manos para llegar a la paz", y les encomendó que lo hagan "con valentía y movidos por una sincera voluntad de servir a ese pueblo que ha puesto en ellos su confianza y por encima de cualquier otro interés de grupo o de partido".

No hay retorno a la violencia

"Sólo así se podrá lograr que los dogmatismos enfrentados no cristalicen en conflictos enquistados que hagan imposible la auténtica pacificación", afirmó el obispo Setién. Durante su homilía, el prelado donostiarra mostró su convencimiento de que existe un deseo popular "cada vez mayor" de consolidar la paz en Euskadi que impida un retorno a la situación de violencia anterior. Ante esta situación, se cuestionó si a ese anhelo de paz "corresponde la puesta en marcha eficaz de los caminos para alcanzarla mediante la eliminación de los obstáculos que a ella se oponen y la puesta en práctica de las acciones positivamente conducentes a realizarla".

Setién fue rotundo al afirmar que "la paz no surgirá por un mero dejar hacer, como si los problemas implicados en su realización se resolvieran automáticamente".

Por otro lado, Eusko Alkartasuna remitirá un informe a los más de 4.000 parlamentarios de los Estados miembros de la Unión Europea donde se recoge información sobre la gestación del Pacto de Lizarra, la tregua de ETA y la dispersión de los presos de la organización terrorista. Esta iniciativa responde al deseo de que dispongan de "información objetiva" sobre la situación del conflicto vasco. En la documentación que recibirán los parlamentarios se les invita a prestar su colaboración para modificar la política penitenciaria y consolidar el proceso de pacificación.