Ranieri prepara el partido ante el Atlético con tres delanteros
Claudio Ranieri parece impulsado por la buena tarde de goles y fútbol que el Valencia vivió el pasado domingo ante el Mallorca (3-0) en Mestalla. El técnico valencianista ensayó ayer el mismo equipo de entonces, que incluye tres delanteros, para enfrentarse el sábado al Atlético de Madrid en la final de la Copa del Rey (21.30, estadio Olímpico de Sevilla). A tenor del entrenamiento de ayer, Claudio Piojo López, Ilie y Vlaovic jugarán a un tiempo, en un claro 4-3-3 en el que Ilie, sin embargo, estará obligado a trabajar defensivamente más de lo acostumbrado. Ilie se dejará caer a la posición de interior izquierda, mientras que el gran sacrificado de la final será Angulo, un jugador decisivo durante la temporada: ha jugado 36 partidos de Liga y ha marcado ocho goles. El desmesurado entusiasmo que ha despertado la final en Valencia tiene una explicación. El club de Mestalla juega su segunda final de Copa del decenio -perdió la de 1995 ante el Deportivo-, pero, además, no ha ganado un título desde hace 18 años (la Supercopa de Europa), al tiempo que la última Copa del Rey conquistada se remonta a 1979, cuando Kempes le marcó dos goles al Real Madrid en el Calderón (2-0). Seis trenes, cuatro aviones y cerca de 125 autobuses, además de un número indeterminado de coches particulares, transportarán a unos 20.000 aficionados del Valencia hacia Sevilla este fin de semana.
No es de extrañar, pues, que el central francés del Valencia Alain Roche, que ya ha jugado y ganado cinco finales de Copa en Francia, se asombre de la pasión con que la hinchada valencianista se ha tomado este partido. O que otro veterano, el italiano Carboni, de 34 años, recomiende a sus compañeros que no lean mucho los periódicos ni vean demasiado la televisión para no cargar con un exceso de responsabilidad. Para prever un posible empate, Ranieri ya estuvo ensayando ayer lanzamientos de penaltis.
Molina, sin nostalgia
En el Calderón, ayer tras el entrenamiento, los jugadores del Atlético se movían con aire distendido. Desestimaban el hecho de que el Valencia haya ganado los dos encuentros de Liga. Sin entusiasmo pero con la ansiedad contenida -como toda la plantilla-, Molina hizo alarde de su dialéctica descarnada al evocar la final de Copa de la temporada 1995-96: "No creo en eso del espíritu del doblete. El pasado es pasado y en el fútbol no se puede vivir de él. Estoy muy orgulloso de aquellos títulos, pero ahora lo que me interesa es ganar de verdad la final del sábado". El equipo que presentará el Atlético está prácticamente perfilado, en vista del entrenamiento de ayer. De los ejercicios, se deduce que el técnico Rádomir Ántic piensa en alinear a los titulares oficiales, y a cada uno en su puesto -salvo Aguilera, que jugará como interior derecha para que Geli entre en el lateral-. En los partidillos, Chamot y Santi oficiaron de centrales, Serena (izquierda) y Geli (derecha) de laterales, y en el centro del campo jugaron los mismos que vencieron al Madrid: Aguilera, Bejbl, Valerón y Lardín. En la segunda punta Juninho; y como nueve, José Mari.
Los 20.000 seguidores del Atlético dispondrán de un servicio especial de Renfe para ir a Sevilla. El sábado partirán diez trenes especiales, cuatro de ellos con el doble de plazas de las habituales. Saldrán de Atocha a las 7.00, 7.30, 8.00, 9.00, 10.00, 10.30, 14.30, 15.00, 15.45, 16.30. Habrá trenes de regreso en la madrugada del sábado al domingo, a partir de las 1.15 y hasta las 3.00. Los aficionados del Valencia contarán con un servicio especial el sábado a primera hora: dos trenes a las 6.30, uno a las 6.55 y otro a las 7.30. Regresarán en la madrugada del sábado al domingo, de 1.15 a 2.30.
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