"Las constructoras dictan la política"

No llega a los 30 y, sin embargo, ha sido, durante la pasada legislatura, el azote del equipo de gobierno popular del Ayuntamiento de Castellón. Su grupo ha plantado cara, según ella, a las propuestas del PP: "En el tema de los accesos al puerto, la privatización de los servicios públicos y la degradación de la zona húmeda de la Marjalería nos han tenido enfrente". La última batalla sobre el planeamiento urbano, la revisión del PGOU, ha hecho exclamar a Amelia Ferreres que "las grandes constructoras dictan la política municipal". Pregunta. ¿Por qué dice que ocho años de José Luis Gimeno en la alcaldía son suficientes? Respuesta. Va a comenzar un nuevo mandato de concejal, que hará que esté 16 años en el Ayuntamiento. Los políticos que se profesionalizan pierden el sentido de la realidad e, incluso, les llega a parecer normal detentar el poder para enriquecerse. Creo que Gimeno debería irse a casa por estar demasiado tiempo en el cargo y por haberse beneficiado de informaciones privilegiadas con Dragados y Necso, adjudicatarias de grandes obras en la ciudad. P. ¿Cree que Castellón se resentirá con la gestión del PP? R. La revisión unilateral del Plan General, si no la tumba Obras Públicas, plantea un crecimiento de la ciudad que contempla 320.000 habitantes cuando resulta que el crecimiento vegetativo es prácticamente nulo. Esa fiebre constructora obedece a los intereses de grandes empresas en donde dirigentes populares tienen sus intereses. El alcalde, en vez de servir a Castellón, se sirve del cargo. Actualmente hay 10.000 viviendas vacías; 7.000 de segunda residencia; y 14.000 por rehabilitar. P. En diversos debates públicos usted cita a las empresas contructoras, ¿por qué? R. Los populares no gobiernan, sirven al mercado. Las grandes constructoras dictan la política municipal. Y todo ello tendrá repercusiones negativas los próximos años. Gimeno es el único alcalde de capital de nuestra Comunidad sin dedicación exclusiva, mantiene todavía su actividad de arquitecto. Su actitud huele a podrido, y para colmo no ofrece ninguna explicación. P. EUPV ofrece un programa alternativo multicolor. R. Frente al gris y los valores crematísticos que imperan pretendemos ofrecer un programa diferente, abierto y democrático. Nosotros lo calificamos de rojo por ser solidario y de izquierdas, porque aspiramos a que se atienda a quien lo necesita; verde, porque Castellón tiene ante sí un fuerte reto ecológico; violeta, porque nos creemos la participación de la mujer. En nuestra lista, los dos primeros lugares los ocupamos mujeres y la lista va compuesta al cincuenta por ciento por compañeros de ambos sexos.