"La libertad en Madrid pasa por la Puerta del Sol"
Quizá bajo sus edificios se esconda un inmenso y mágico imán que atrae la energía humana. Sería una explicación fantástica del porqué la Puerta del Sol resulta tan irresistible para madrileños y recién llegados de toda condición. Inmigrantes, turistas, funcionarios, jubilados, artistas, estudiantes, amas de casa, carteristas y políticos se mezclan a diario en esta plaza en la que se encuentra el inquietante kilómetro cero o el símbolo de Madrid, el oso y el madroño. El historiador Juan Carrete (nacido en Madrid en 1944), director de la Calcografía Nacional, ha rebuscado en el pasado de este emblemático emplazamiento desde que se tuvo la primera noticia de su existencia, en 1478. El resultado de la investigación, en la que han intervenido un equipo de seis historiadores, ha quedado recogida en el libro La Puerta del Sol, que se presentó el martes en la Cátedra Mesonero Romanos, centro que acoge, además, una didáctica exposición sobre la evolución urbana, los edificios y la vida cotidiana del centro por excelencia de Madrid.Pregunta. ¿Por qué eligió la Puerta del Sol para su investigación? Respuesta. Porque, siendo el lugar más concurrido de Madrid, estoy convencido de que los madrileños conocen muy poco de su historia.
P. ¿Por qué la bautizaron así?
R. No se sabe muy bien si es porque está orientada hacia el Este o porque hubo en la plaza en el siglo XVI un arco de madera que tenía pintado un sol en la parte superior.
P. Imagínese que tuviera que rebautizar a la Puerta del Sol, ¿qué nombre le pondría?
R. Sin lugar a dudas, la Puerta de la Libertad, porque es el espacio simbólico al que históricamente recurre el madrileño para sus reivindicaciones liberales. La libertad en Madrid pasa por la Puerta del Sol.
P. ¿Ha estado siempre como la conocemos hoy?
R. Su fisonomía actual data de mediados del siglo XIX, cuando se produjo la desamortización eclesiástica y se quemaron los conventos que ocupaban casi toda la plaza. El edificio más antiguo actualmente es la Casa de Correos, cuya construcción se terminó en 1768. Desde entonces no ha variado mucho urbanísticamente. Sí han ido cambiando los elementos ornamentales.
P. De esos elementos ornamentales, ¿quitaría alguno?
R. Sí, la estatua de Carlos III. Es un error iconográfico porque a los reyes se les pone a caballo cuando entran victoriosos a la ciudad y no es el caso.
P. ¿Cuál ha sido el hecho histórico más importante que ha tenido lugar en esta plaza?
R. Hay muchos. Desde el levantamiento del pueblo contra las tropas francesas en 1808 o la proclamación de la Segunda República en 1931 hasta las manifestaciones que se organizan hoy, todas empiezan o terminan en Sol.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.