El Barça prepara su quinto título en Zagreb
Caja Cantabria y Ademar se disputan la final de la Recopa
El FC Barcelona iniciará hoy en la pista Com Sportova de Zagreb la batalla por la consecución del quinto título de la Copa de Europa de balonmano (18.15, C-33). El Barça realizó ayer el último entrenamiento antes de la final en el Palau Blaugrana y, por la tarde, inició el largo desplazamiento hacia Croacia. Para evitar problemas, la expedición azulgrana aterrizó en Liubliana (Eslovenia) y realizó el resto del desplazamiento hasta Zagreb en autocar. La proximidad de la guerra en Yugoslavia no perturba, sin embargo, a los jugadores del Barça. "Si se dan las condiciones para ir, hay que viajar", se limitó a comentar el lateral Iñaki Urdangarín. Patrick Cavar agregó que el ruido de los aviones es el único signo de la guerra en Croacia.El Barça no ha perdido con el Badel Zagreb ninguno de los siete encuentros que han disputado en los últimos tres años. La última visita de los hombres de Valero Rivera a la pista de los croatas se saldó con una victoria de los azulgrana por 22-28. Y aquella fue la última derrota sufrida por el Badel en su pista.
Badel y Barça son dos equipos habituales en las finales continentales. El Badel ganó la Copa de Europa dos veces consecutivas (1992 y 1993), pero luego el Elgorriaga Bisadoa (1995) y el Barcelona (1997 y 1998) le derrotaron en la final y le impidieron ampliar su palmarés. El Barça ha logrado un récord al ganar las tres últimas copas de Europa consecutivas. Sin embargo, la final que hoy va a iniciarse puede dar al Barcelona su quinta corona de la Copa de Europa, y eso le permitiría igualar el récord absoluto que posee el Gummersbach (Alemania), que ganó su primer título en 1967 y el quinto en 1983.
"Nos enfrentamos a un gran rival, un equipo que, además, nos tiene muchas ganas", señaló ayer O'Callaghan, una de las piezas fundamentales en los esquemas de Valero Rivera. Técnico y jugadores coinciden en valorar la trascendencia del partido de hoy. "Tendrán el apoyo de 14.000 espectadores y utilizarán todas las armas posibles en defensa para ganar", agregó Garralda.
La actuación arbitral de los daneses Boye y Jensen es una de las principales preocupaciones de los azulgrana. "Parece que nadie quiere que gane el Barça. El arbitraje es un factor decisivo cuando se juega con tanta presión en la pista", asegura el portero Svensson.
Al margen de todas las circunstancias anexas, la principal preocupación del Barça es el Badel. "Yo creo que juegan mucho mejor que el año pasado", asegura Valero Rivera. El Badel, ex equipo de Cavar, sigue contando con una primera línea espectacular, basada en las aportaciones de Saracevic, Tomljanovic, Dominikovic y Bilic. Este eje encuentra su perfecto complemento en las aportaciones de la segunda línea, los extremos Udovicic y Dzomba y el pivote Jovic. Los ataques suelen ser largos y trabajados. Y la defensa es marrullera, agresiva y durísima. El Badel es uno de los equipos menos goleado, gracias también a la incuestionable aportación de su portero Mirko Basic, de 39 años, y de su suplente, Venio Losert. El Barça basará su estrategia en el robo de balones en defensa y la efectividad de su crontaataque.
Las otras finales
Otros cuatro equipos españoles disputan finales de competiciones europeas. El Caja Cantabria recibirá hoy al Prosesa Ademar en el encuentro de ida de la final de la Recopa (18.30).El Valladolid recibirá al Magdeburgo alemán mañana (12.00) en la final de la Copa EHF. Y el Ciudad Real se desplazará a Flensburg (Alemania) para afrontar la ida de la final de la Copa de las Ciudades. En categoría femenina, el Ferrobús Mislata recibirá hoy al Frederiksberg (Dinamarca) (18.30) en la ida de la final de la Recopa.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.