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Canal + reúne a niños y ancianos en 'El juego de las lunas'

La televisión se alimenta con frecuencia de la gracia y el desparpajo de los más pequeños. En el extremo opuesto, los ancianos suelen permanecer apartados de la programación. Y sin embargo, constituyen también un importante potencial televisivo. Canal + lo demostrará a partir del próximo sábado con el estreno de El juego de las lunas (14.00), un programa de entretenimiento de media hora de duración y periodicidad semanal en el que los protagonistas son los dos sectores más extremos de la población.

El juego de las lunas es un espacio de producción propia que parte de una idea original de su director, Miquel Obiols. La presentadora será Montserrat Iglesias, profesora de Teoría de la Literatura en la Universidad Carlos III de Madrid, que se inició en televisión con Te+, de Canal +.En este programa, dos jugadores deberán cazar al vuelo las palabras que se esconden tras las rocambolescas definiciones improvisadas (aunque grabadas previamente) por niños y mayores, del estilo de "cuando alguien te peina, como mi madre cuando me peina..., algunas veces puede que se te vaya la memoria y te salten las palabras y se vayan a otro lado escondidas" (Sara, 5 años), o "la torre de Babel es cuando empezaron a hablar distintas lenguas y nadie les entendía" (Avelina, 85 años, y Pepita, 79).

El juego se estructura en fases, durante las que los participantes irán acumulando las órbitas que les llevarán a los premios finales: un viaje al observatorio del Teide para el que consiga la máxima puntuación y una caja del Juego de las lunas para el perdedor. Aunque hay premio, "es un juego y no un concurso, porque el concurso se suele asociar con algo trivial donde lo importante es ganar. Aquí lo que importa es saber escuchar, saber interpretar lo que se dice y conocer las historias que cuentan los protagonistas", según remarcó ayer Obiols durante la presentación del programa.

Según el director, El juego de las lunas es el primer juego de la televisión que reúne a niños y abuelos, y su estreno es oportuno porque en 1999 se celebra el año intergeneracional dedicado a ellos. Obiols indicó además que "los niños y los abuelos en general se entienden mucho. Y con los cambios generacionales, las personas mayores vuelven a importar mucho porque se están convirtiendo en el grueso de la población". La estética del programa, que combina un decorado con regusto antiguo y un grafismo innovador, resume la filosofía de unir lo nuevo con lo viejo.

Aunque se estrena el sábado, la preparación del espacio se inició el pasado septiembre. Desde entonces, el equipo que lo elabora graba una media de 25 horas semanales de intervenciones de pequeños (en escuelas) y ancianos (en sus lugares de reunión).

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