Federación y Liga sólo quieren 12 equipos de Segunda y 8 de Segunda B en la Copa

Los clubes más poderosos, con el consentimiento de la Federación, a la que compete su organización, van camino de convertir la Copa del Rey en un torneo devaluado. La Liga Profesional y la Federación han abierto esa senda tras acordar el pasado lunes reducir el número de SegundaB y Segunda División en la próxima edición del torneo. La excusa ha sido la falta de fechas ante el apretado calendario para la próxima Liga y ahora sólo falta conocer la postura que pueden adoptar los clubes marginados.La Liga y la Federación se han comprometido a reducir los equipos participantes en la próxima Copa a 40: los 20 de Primera; los 12 primeros de la tabla de Segunda y los ocho mejor clasificados de SegundaB. Sus eliminatorias se mantendrán a doble partido y comenzarán con la ronda de dieciseisavos, con la participación de 13 equipos peor clasificados de Primera, como cabezas de serie, 11 de Segunda -los que van del segundo al undécimo- y los ocho de SegundaB.

Los 16 equipos que pasen la ronda se enfrentarán entre sí en la siguiente eliminatoria. Los ocho clasificados de esta fase disputarán los octavos de final con los siete equipos de Primera División que hayan iniciado las Copas de la UEFA y el campeón de Segunda División, título que, además del ascenso, llevaría el premio de quedar exento hasta entonces. El resto del torneo se completaría con las siguientes eliminatorias: cuartos, semifinales y final. En total serían 11 fechas para completar la próxima Copa del Rey, cuando en el torneo de esta temporada van a ser 15.

Las fechas de la próxima Copa están aún sin decidir. Otro detalle que habla del interés y categoría que se concede a esta competición. El torneo es plato de segunda mano, condicionado a las fechas de la Liga, que tienen prefereencia. Resta, además, por conocer la respuesta de los equipos de Segunda y Segunda División B que tradicionalmente han disputado este torneo desde hace un montón de años y que a partir de la próxima edición van a ser excluídos de él.

La UEFA incluso ha devaluado el torneo de la Copa. A partir de la próxima temporada prescinde de la Recopa, destinada exclusivamente a los campeones de la Copa de los países afiliados al máximo organismo del fútbol europeo. A estos campeones se les va a recompensar con participar en la Copa de la UEFA, el torneo que permanece como una competición de segundo rango tras la Liga de Campeones.

Villar y el calendario

El presidente de la Federación, Angel María Villar, por otro lado, aseguró ayer que "no es definitiva" la posibilidad de iniciar la Liga 1999-2000 el 15 de agosto, como el lunes el organismo que preside acordó con la Liga Profesional. Villar precisó que esa fecha corresponde sólo "a un principio de acuerdo entre clubes y federación". El presidente federativo insistió en que la confección de un calendario "es muy complicada".