El presidente del Vélez Sarsfield dice que cerrará el traspaso de Ayala

El culebrón Ayala prepara una nueva entrega. En este capítulo, el futuro profesional del central paraguayo que milita en el Betis vuelve a ser sopesado. Ayer, una semana después de que el presidente del Betis, Manuel Ruiz de Lopera, interrumpiera las negociaciones con el Vélez Sarsfield argentino, interesado por hacerse de inmediato con los servicios de Celso Ayala, el presidente del club americano, Raúl Gámez, anunció que esta semana se concretará con el Betis el traspaso del internacional paraguayo.La salida de Ayala del Betis se ha convertido en un quebradero de cabeza para Lopera. El máximo mandatario bético pagó 800 millones de pesetas por Ayala al River Plate argentino; y para traspasarlo, Lopera rebajó en cien millones su valor de origen. El Vélez planteó ejecutar el pago de los 700 millones restantes en dos plazos, algo a lo que Lopera se opuso frontalmente: "Estos señores quieren que les preste mi Mercedes nuevo a cambio de nada. No me garantizan el pago ni nada". En este punto, el River Plate hizo valer una cláusula preferencial de compra sobre el jugador y el traspaso de Ayala se frenó en seco.

La llegada de Ayala al Betis obedecía a las necesidades que presentaba el conjunto verdiblanco en su línea defensiva al estar Vidakovic inmerso en un largo proceso de recuperación de la grave lesión de rodilla que le ha impedido debutar aún esta temporada. Muy pronto, Ayala empezó a dar claras muestras de inadaptación a la ciudad y al equipo.

Nada más llegar a Sevilla, Ayala viajó con permiso del club y del entonces técnico, Vicente Cantatore, a Argentina para solucionar la venida de su familia. Su estancia se prolongó demasiado. Problemas con el visado, alegó en su disculpa. Ésta fue su primera salida de tono

Clemente lo aparta

Pero ha sido con Javier Clemente con quien Ayala ha chocado de lleno. Las vacaciones navideñas fueron el comienzo de su particular gresca. Ayala se demoró una semana en regresar de Argentina. A su vuelta, Clemente le tenía preparada una sorpresa: un plan especial de entrenamiento en solitario que el central paraguayo cumplió a rajatabla hasta que sus compañeros de equipo intercedieron por él.Desde entonces, la relación entre técnico y jugador se fue deteriorando. Clemente seguía contando con Ayala una jornada tras otra empujado por las contínuas lesiones que han sufrido los componentes de la zaga. Además de Vidakovic, Otero, Ureña, Jaime y el propio Ayala han permanecido algún tiempo en el dique seco. Pero las cosas cambiaron. El discreto y comedido Ayala de Sevilla se soltó el pelo ante los medios de comunicación argentinos. Calificó a Clemente de inepto en custiones de fútbol, criticó su forma de dirigir el equipo- "en los entrenamientos no hacemos nada", dijo- y esto le costó el ostracismo con el beneplácito de Lopera. Un Lopera que el domingo, eufórico tras la victoria ante el Real Madrid, mostró un cambio de parecer respecto a la situación de Ayala: "Me gustaría que se quedase, pero eso es cuestión del técnico. Con las lesiones de Vidakovic y Jaime nos habría venido muy bien que jugara Ayala, y no que ha estado en el palco tomando café y dulces más fuerte que un toro"