Sin Cipollini, toca repartir

La Vuelta regresó ayer a la celebración del llano con Chaba Jiménez, un escalador, como jefe de la carrera. Fue un trámite antes de volar hacia la cita de Mallorca. En la isla se reconocerá a los mejores antes de afrontar las etapas del Pirineo. El concurso será en la contrareloj de 40 kilómetros de mañana. Olano, Zülle y Jalabert tienen a punto sus máquinas. Mientras, el turno ha vuelto a los especialistas en las llegadas.Pero la Vuelta encuentra a faltar espectáculo en la meta, a ese Cipollini que levanta pasiones fuera y dentro de la carretera. A falta de Cipollini, los sprinters se reparten el pastel. Ayer, fue Giovanni Lombardi (Telekom) quien consiguió pasar el primero en la meta de Valencia. Lo había intentado en anteriores jornadas, junto con Blijlevens, Wust, Kirsipuu -ayer abandonó- o Ángel Edo. Todos andan a la greña en busca de la gloria del día.

El alto del Catí, en la víspera, dejó anotado en el libreto de la carrera el discurrir durante los dos siguientes actos de la ronda. El Banesto puso la carrera donde quería. Jiménez de líder. Abraham Olano colocado y dispuesto a relevar al bueno de Chaba. Roberto Heras -segundo en la general- y Fernando Escartín, del Kelme, acreditaron su candidatura. Y el Festina, sin hacer ruido en la primera semana, esta ahí, con Alex Zülle, Richard Virenque y Laurent Dufaux. Un trío completo. El Banesto y el Kelme temen al Festina. No en vano, las voces lo señalan como el Pantani del Tour en la Vuelta.

Por el momento, la hegemonía de la carrera corresponde al Banesto. Lo demostró ayer. Ejerció el control de la carrera de una manera somera, sin hacer ruido, sin desgastarse. No como otros equipos españoles. No se trata de consumir energías para mandar. A lo Induráin. Hace y deja hacer. Así de sencillo.

La carrera se rompió con la escapada a las primeras de cambio de Dierckxens, Frizzo y Piccoli. Por delante, una eternidad hacia Valencia. El grupo consigue cinco minutos de diferencia con el grupo. Punto kilométrico 77.

Todos miran a los hombres del Banesto. Son ellos los que tienen el líder. "Que no cunda el pánico", parece decir el Banesto. El equipo del Chaba y Olano comienza a trabajar para que la diferencia de los escapados no aumente. No sólo lo consigue sino que lo mantiene entre el minuto y minuto y medio hasta los 100 kilómetros de recorrido. En ese punto, deja el testigo a los equipos de los sprinters. Para el Banesto, el desgaste está terminado.

La fisonomía del final de etapa corresponde al Telekom, TVM y Festina. A ciclistas como Lombardi, Blijlevens y Wust. Sus hombres en las llegadas. Los aspirantes que luchan en su terreno predilecto con el objetivo de ser el Mario Cipollini de la Vuelta a España. Nadie, en la primera semana, lo ha conseguido.

El Chaba sigue al mando. Hasta el domingo, en la contrareloj de Alcúdia. El turno será entonces para Abraham Olano o Alex Zülle.

Registro al Cofidis

Un camión del equipo Cofidis, que participa en el Tour del Porvenir, fue registrado en el peaje de Nangy por aduaneros franceses. Según fuentes de estos servicios, en el interior de las bolsas de algunos corredores se encontraron productos dopantes, aunque en pequeña cantidad, informa Europa Press. El Servicio de Administración de Aduanas envió el informe al Ministerio Fiscal de Thonon les Bains.