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El Consell debe 90.524 millones a proveedores

El Consell debía a sus proveedores 90.524 millones de pesetas a finales de junio, según recoge el balance de sumas y saldos de la Generalitat elaborado por la Consejería de Hacienda correspondiente a la primera mitad del actual ejercicio presupuestario. La cifra, desmesurada para la oposición, es calificada como perfectamente habitual por fuentes populares, que recuerdan que el presupuesto de la Generalitat supera el billón de pesetas. Según los mismos datos, la deuda a largo plazo de la Administración autonómica ascendía a 488.239.000 millones a final de junio.

La deuda a largo plazo de las administraciones corresponde a las obligaciones contraídas con entidades financieras de todo orden para afrontar el pago de inversiones públicas, según establece la normativa presupuestaria del Estado. El Banco de España estimó en 425.000 millones la deuda a largo plazo acumulada por la Generalitat a finales de 1997. En el cómputo de la deuda a largo plazo no se incluyen los compromisos de pago adquiridos por ayuntamientos o diputaciones; las obligaciones adquiridas a través del método alemán de pago llave en mano, que sólo se hacen efectivas una vez finalizadas las obras contratadas; o fórmulas como el plan de financiación de las universidades, que han emitido deuda a 25 años para afrontar obras por valor de 75.000 millones. En el capítulo a corto plazo, es decir, la deuda generada por operaciones de tesorería que deben pagarse en el plazo máximo de un año, los datos oficiales arrojan un volumen de 117.624 millones. Joan Romero y la cúpula del grupo parlamentario socialista advirtió el jueves sobre el volumen de las obligaciones pendientes acumuladas por la Hacienda pública valenciana, que ronda los 700.000 millones. La suma de la deuda a largo y corto plazo y de las obligaciones contraídas con los proveedores de la Generalitat arroja un saldo efectivamente superior a los 695.000 millones de pesetas. Ingresos pendientes Un tercer dato, especialmente alarmante, según destaca Víctor Fuentes, portavoz socialista en cuestiones de Hacienda, es el correspondiente a la ejecución de los ingresos pendientes de cobro de 1997. La liquidación de las cuentas públicas correspondientes al pasado ejercicio arrojaba un déficit de apenas 16.000 millones, pero consignaba como ingresos pendientes de cobro la friolera de 290.868 millones. Mediado el ejercicio, Hacienda sólo ha logrado ingresar 38.616 millones, de modo que tiene pendientes de cobrar 252.252 millones correspondientes al año pasado. La lectura de las cuentas desde las filas populares es diametralmente opuesta. Ricardo Costa, portavoz parlamentario de Hacienda, asegura que la Consejería de Hacienda viene pagando a los proveedores con un retraso de entre dos y cuatro meses, lo que implica una eficiencia muy superior a la de la propia empresa privada, donde los pagos se aplazan regularmente a 90 o 180 días. Sobre el volumen de la deuda a largo plazo, el diputado autonómico explica que el crecimiento porcentual de las obligaciones contraídas por la Generalitat desde que los populares asumieron el poder se ha reducido drásticamente. Según Costa, la deuda a largo plazo creció un 44% en 1992, un 30% de 1993 y un 25% en 1994, los tres últimos años de gestión socialista. Mientras que desde que José Luis Olivas asumió la cartera de Hacienda, las obligaciones a largo plazo sólo han crecido a razón de un 10% anual, un indicadorque señala un claro de descenso del volumen de inversión pública. Costa recuerda que la deuda de la Generalitat Valenciana sigue ofreciendo las máximas garantías, según las agencias internacionales de calificación financiera, y destaca que el equilibrio presupuestario no sufre ningún riesgo. Si se considera la deuda per cápita en relación con otras comunidades autónomas con un nivel de competencias similar, sólo Canarias supera la deuda por habitante, según los populares. También afirman que la proporción que supone el volumen de la deuda con relación al PIB autonómico asciende a un escaso 7%, muy por debajo del 10,8% de Navarra, el 10% de Andalucía o el 9,8% de Galicia. La ejecución de los ingresos pendientes queda sin embargo en la nebulosa. Los 252.252 millones que tiene previsto ingresar la Generalitat por derechos correspondientes al ejercicio pasado son una losa ante la que sólo se pueden ofrecer buenas intenciones.

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