Maragall y Carod explorarán la posibilidad de un pacto poselectoral

El candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, Pasqual Maragall, explorará en una próxima entrevista con el líder de Esquerra Republicana (ERC), Josep Lluís Carod-Rovira, las posibilidades de alcanzar un pacto poselectoral con el partido independentista. Maragall telefoneó el lunes pasado a Carod en respuesta a la carta pública del dirigente republicano que recibió días antes y ambos se citaron para una entrevista que se celebrará probablemente después de la Diada de Cataluña. Carod confirmó ayer a Efe su disposición a hablar con Maragall sobre un posible acuerdo poselectoral, pero descartó taxativamente toda posibilidad de que ERC pudiera participar en una eventual coalición electoral con el dirigente socialista. "Eso sería como entrar en la dimensión desconocida", dijo el líder independentista. El líder de ERC envió el pasado mes de agosto una carta pública a Maragall y al nacionalista Jordi Pujol, presidente de la Generalitat, en la que se les ofrece por separado para negociar un pacto poselectoral si ninguno de ambos candidatos obtiene mayoría absoluta en las elecciones autonómicas, previstas para la próxima primavera. El primer secretario del Partit dels Socialistes (PSC), Narcís Serra, ha reiterado esta semana la disposición de su partido a dialogar con ERC y con otras fuerzas políticas y sociales del centro izquierda catalán. Serra lamentó, sin embargo, que el líder de ERC se haya dirigido por igual a Maragall y a Pujol. A juicio del jefe de filas socialista, Carod debía haberse abstenido de escribir al presidente de Convergència i Unió (CiU). Carod se mostró ayer escéptico respecto a las posibilidades de que tanto Pujol como el candidato socialista lleguen a aceptar su oferta porque, a juicio del líder republicano, ambos están incapacitados para ser el motor del cambio que necesita Cataluña. "Ambos", dijo Carod, "representan el pasado y el continuismo". Maragall también ha mantenido contactos durante las últimas semanas con dirigentes de Iniciativa per Catalunya, así como con representantes sociales de carácter independiente, al objeto de reunir una alternativa progresista a Pujol.