Dos niños mueren al arder el coche en el que estaban mientras su padre compraba

Dos niños de tres y cinco años, ambos con las iniciales I. H. A. y vecinos de Parets del Vallès, murieron tras incendiarse el pasado lunes en Sant Boi el coche en el que esperaban a su padre, que se encontraba comprando en un almacén de artículos de segunda mano. La Policía Local ha abierto una investigación por orden del juez para determinar las causas que originaron el incendio del automóvil, que ayer aun no habían sido aclaradas. Los hechos sucedieron el pasado lunes y el menor de los hermanos fue rescatado por los bomberos ya cadáver; el niño de cinco fue trasladado a un centro hospitalario, donde murió ayer.

Lo que sí ha trascendido de las primeras investigaciones es que el fuego se inició en el salpicadero del vehículo. Con este dato, los primeros pasos de las pesquisas se dirigen en dos direcciones: que el fatal incendio se originara por algún problema en el sistema eléctrico del vehículo o que los dos niños estuvieran jugando con el encendedor que se encuentra en el salpicadero o con algún otro mechero que hubiesen encontrado en el interior del coche de su padre. Las partes del automóvil más afectadas por el fuego fueron el panel frontal, los asientos delanteros y el techo. El incendio se produjo hacia las 14.00 horas del pasado lunes. En aquel preciso momento, los niños se encontraban dentro de una furgoneta marca Citroën, modelo C-15, de color blanco. El vehículo estaba estacionado y con el motor apagado frente al número 58 de la avenida de Marina, en el polígono industrial Salines de Sant Boi, junto a la autopista A-16. El padre de los pequeños había acudido a comprar al almacén que la empresa Troc Internacional, dedicada a la compraventa de todo tipo de artículos usados y de segunda mano, tiene en la zona. Dos vehículos de bomberos procedentes del parque de Cornellà acudieron inmediatamente con el fin de sofocar el fuego, tras ser alertados por los empleados del propio almacén. Éstos fueron los que advirtieron el humo que salía del coche y llamaron la atención de su propietario. Los mismos trabajadores de Troc echaron mano de los extintores de sus almacenes para intentar sofocar las llamas a la espera de la llegada de los bomberos. Uno de estos empleados resultó muy afectado por el accidente y, según fuentes de la empresa, ayer no pudo acudir a trabajar. Fatal desenlace La rápida intervención, sin embargo, no pudo evitar el fatal desenlace. El más pequeño de los hermanos murió calcinado en el interior del vehículo de su padre antes de que los bomberos pudieran rescatarlo del infierno de llamas y humo. El mayor de los niños sí que logró salir con vida de la furgoneta, aunque las graves quemaduras que sufrió resultaron fatídicas. Murió en la mañana de ayer mientras permanecía ingresado en la unidad de quemados de la Residencia Sanitaria del Vall d"Hebron de Barcelona. El cuerpo del mayor de los dos hermanos fallecidos fue trasladado ayer al Instituto Anatómico Forense del Hospital Clínico para que le fuera realizada la autopsia, procedimiento que suele ser habitual en el caso de fallecimientos tras los que se abre una investigación judicial. El hecho de que la muerte de los pequeños se haya producido en dos ciudades distintas -el hermano pequeño falleció en Sant Boi y el mayor en Barcelona- ha supuesto que el caso lo sigan dos juzgados diferentes: el de Instrucción número 3 de Sant Boi de Llobregat y el 14 de Barcelona.