¿Y esto de las primarias, cómo se paga?

En las elecciones internas de los socialistas valencianos no hay prevista ninguna subvención estatal por voto conseguido. El ejercicio de la democracia en el seno del PSPV corre a cargo de la militancia y de los candidatos. El secretario de Organización del PSPV, Joan Ignasi Pla, no dispone en el presupuesto de ninguna partida específica para sufragar el coste de las primarias e intentar que los candidatos, además de tiempo, no pongan dinero en la realización de la campaña. Según la circular remitida por la secretaría federal de Organización, que ocupa Ciprià Ciscar, las federaciones territoriales tienen obligación de garantizar una dotación básica a los aspirantes a cabeza de cartel. Lo que ya se conoce como la oficina del candidato. Los tres contendientes en las primarias autonómicas, Joan Romero, Antoni Asunción y Clementina Ródenas ya disponen, desde hace días, de despacho propio en la sede central del PSPV. En estas instalaciones habilitadas provisionalmente durante la campaña se ha facilitado a los candidatos un ordenador y el uso de teléfonos, fax y fotocopiadora. En cada uno de los despachos trabajan diariamente, para su candidato correspondiente, entre dos y cinco personas. Este personal -voluntarios y liberados de grupos políticos y sindicatos- prepara las tareas de los candidatos. El partido no tiene previsto destinar ningún recurso más a sufragar los gastos de los candidatos y son los aspirantes los que deben ingeniarselas para llegar al mayor número de agrupaciones socialistas con el menor gasto posible. El equipo de Joan Romero ha previsto la emisión de bonos de ayuda de 2.500 pesetas cada uno. La recaudación de los militantes y simpatizantes que colaboren servirá para pagar la gasolina de un coche particular, un micrófono y, si el partido no la sufraga, una carta a la militancia. Por su parte, Antoni Asunción ha suscrito, con algunos de sus más directos colaboradores, una póliza de crédito con la que pretende afrontar los gastos de campaña. Clementina Ródenas ha optado por dirigirse al partido, al que ha reclamado un escenario con las siglas del PSPV, una furgoneta y una persona que se encargue de su instalación. Pla estima el coste total de esta demanda en cerca de medio millón de pesetas durante toda la campaña. A medida que reciba las peticiones de los candidatos, el secretario de Organización del PSPV intentará cubrirlas rascando de otras partidas. Aunque lo que tenga uno podrán tenerlo los otros dos si así lo desean.